Experiencias crossdevice

Estamos bastante acostumbrados a que los dispositivos de entrada de datos sean cosas un poco básicas: los mandos o los teclados son un ejemplo, con cientos de botones o teclas físicas que hacen distintas funciones en un aparato en cuestión. Pero, desde hace unos años podemos considerar a un smartphone también un dispositivo de entrada de datos, aparte de un dispositivo donde visualizar datos. Y eso tiene sus ventajas.

Desde hace un tiempo tengo un Apple TV de 4ª generación. He de decir a su favor que el mando que lo acompaña es algo un poco más usable que la media gracias a básicamente dos cosas: que es Bluetooth y no infrarrojos (por tanto puedes usarlo desde muchas más partes sin tener que apuntar demasiado) y que tiene una parte táctil que no funciona del todo mal para moverte por los menús. A Siri lo dejamos para otro artículo:

Lo que sí sucede es que, probablemente, una interfaz como un mando donde tienes que ir moviéndote tecla a tecla quizá no sea la manera más ágil de usar algo, y por cosas así en Apple descartaron un iPhone con clickwheel supongo:

¿Qué sucede? Que la propia Apple terminó lanzando al mercado una app móvil para iOS llamada Apple TV Remote que te permite una cosa que cambia bastante tu experiencia: poder usar el teclado de tu dispositivo iOS para introducir texto en tu Apple TV. De esta manera puedes loguearte con campos de texto en distintos servicios de una manera más o menos sencilla; Facebook también ha hecho avances interesantes en este campo y convierten algo tan aparentemente difícil en una TV como un login en algo bastante sencillo y rápido como en el resto de dispositivos, evitando tener que usar uno de esos horribles e inusables «teclados para TV».

Muerte y destrucción.

Otro de esos puntos de fricción son los coches: equipados con sistemas de detección vocal o diversos tipos de instrumentos para moverse por ellos de una manera más o menos sencilla como una rueda con click como en el caso de Mercedes. De igual manera, tener que ir seleccionando letra a letra para meter una calle es un absoluto dolor:

Para solucionar esto volvemos a las experiencias crossdevice: en los últimos modelos de Volkswagen puedes mandar rutas establecidas desde un smartphone al navegador del coche. De esta manera usas el dispositivo más sencillo para teclear (tu smartphone) y el mejor dispositivo para ver la ruta (el navegador de tu coche) para visualizarla. Win win.

Hay otro campo donde poco a poco se empiezan a ver experiencias crossdevice de este tipo: los hoteles. Tradicionalmente, muchos hoteles tenían sistemas de entretenimiento a la carta, con taquilla y demás, todos los hemos disfrutado en alguna ocasión. Pero la llegada de servicios de streaming como Netflix o HBO y los dispositivos móviles hacen que cada vez más gente quiera seguir viendo sus series o sus películas cuando está fuera de casa en un hotel: cualquiera pensaría que teniendo un smart TV se soluciona, pero te toca gestionar esa protección de datos del huésped, que quizá ha olvidado desloguearse. Esto se soluciona en gran medida con servicios para hacer mirroring de smartphone (da igual iOS/Android) como Innspire, permitiendo que los datos privados estén en el smartphone del usuario y la TV del hotel simplemente sirva como lienzo:

Estoy seguro que a medida que pase un poco el tiempo iremos encontrando situaciones donde quizá hacer todo con la misma interfaz no tiene mucho sentido, especialmente en cosas un poco complejas como tener que escribir algo sin tener un teclado al uso o para salvar problemas legales de privacidad como sucede en los hoteles. Y eso ayudará en gran medida a que usemos nuestra TV para más cosas que ver películas o series.

Contenido generado por el usuario: pasado, presente y futuro

327421869_aa84f2c706_o

2006

La foto que ilustra este artí­culo tiene casi 10 años y recuerdo perfectamente el momento y el lugar donde la saqué, con un Nokia 6230i (rudimentario visto en perspectiva pero un muy buen teléfono en su momento).

Con varios alumnos de la Escuela Universitaria Informática de la universidad montamos una serie de charlas para alumnos contando cosas fuera de nuestro dí­a a dí­a. Recuerdo que hablé de Blogs, Redes Sociales y entre otras cosas un nuevo servicio que se llamaba Twitter y que habí­a sido creado unos meses atrás.

En un instante concreto saqué esta foto a los asistentes (podéis comprobar que en Salamanca, como es de esperar, hay más gente en los bares que en las aulas) y la envié por correo electrónico desde el mismo teléfono en ese instante a Flickr por GPRS para que se subiese en mi galerí­a segundos después y enseñársela en la web a los asistentes. Aquello, que hoy es bastante obvio en plataformas como Instagram, era bastante sorprendente y mostraba un camino interesante para los usuarios teniendo en cuenta el desarrollo de Internet.

El sedimento

«Esto es un ámbito donde uno no escribe un principio que tiene vigencia durante doscientos años. Esto no es un ámbito donde uno pinta un cuadro que será admirado por años, o construye una iglesia que será admirada durante siglos. No. Esto es un ámbito donde uno hace su trabajo y en diez años estará obsoleto y probablemente ni siquiera sea usable en veinte. En realidad es como el sedimento de las rocas. Tú estás construyendo una montaña a la que contribuyes con tu pequeña capa de roca sedimentaria para hacer la montaña mucho más grande. Pero nadie en la superficie, a no ser que tenga una visión de rayos X, verá tu sedimento. Aunque la montaña se soporte en esa capa. Solo será apreciada por ese raro geólogo.»

Steve Jobs, en 1994.

Vivimos en un mundo al minuto, donde las audiencias crecen y crecen y los medios mutan, donde la tecnologí­a cambia a la economí­a hasta el punto de que como sociedad ignoramos hacia dónde estamos yendo.

Una parte de las empresas y proyectos que crecen en medio de esta crisis, como el caso de Pepephone o eldiario.es, Infolibre, en menor medida, son empresas que son conscientes de que tienen un crecimiento lento, menor que el de otras empresas, derivado de no buscar riesgo ni un gran beneficio cortoplacista, sino una visión, transversal a todos sus productos, que se va moldeando poco a poco como el trabajo de un artesano.

Hemos roto como sociedad el ví­nculo que existí­a entre calidad y conocimiento: en el momento en el que no existen filtros y cualquiera puede tener sus cinco minutos de gloria en Youtube tenemos más acceso a la información. La cuestión es si es de calidad. Hemos conseguido que decir poco sea lo raro.

Creo que desde el momento en el cual para ganar más dinero tienes que conseguir más impresiones y por tanto publicar con más frecuencia tienes un problema. Porque, de esta manera, lo que estamos creando son máquinas de crear contenido, independientemente de si es de calidad o no: en el momento en el que robots pueden crear noticias automáticamente y con sentido semántico (ejemplo uno, ejemplo dos, ejemplo tres), tu propuesta de valor tiene que ser otra. ¿Cuál? Probablemente poner el foco en la calidad, en los nichos de mercado y en volver a las raí­ces: reportajes elaborados mediante crowdfunding, gente que decide pagar y exigir un reportaje sobre algo concreto. O, por ejemplo, cómo articular tu propuesta de valor en torno al conocimiento cuando hay increí­bles cursos gratuitos en Internet o charlas de auténticos expertos. Y, aún con ello, existirán más y mejores oportunidades. Simplemente serán otras nuevas.

Creo que marcas como ING Direct triunfan hoy en dí­a porque tienen una visión a largo plazo muy clara de quién es su público, lo que le gusta y cómo se lo dan. No tengo ni idea de si ellos son mejores o peores que su competencia, si son más o menos éticos que otros, pero sin duda sé que tienen muy claro lo que quieren y lo que dan a cambio. Y, los resultados ahí­ están, con el mejor ejemplo de «si algo funciona te copiarán» como el caso EVO Banco, que por cierto fue gestionado hasta hace apenas un mes por antiguos responsables de ING Direct en España.

La Bolsa ha hecho mucho daño. No se puede pensar solo en el corto plazo, en el beneficio trimestral porque la Bolsa te obliga, como hacen muchas multinacionales que se están autoengañando y engañando a sus accionistas haciéndoles creer que ganan más de lo que de verdad ganan. La fortaleza de las empresas se demuestra cuando crean productos que servirán para el futuro, para el largo plazo.

Luis Bassat, en una entrevista.

El momento en el que tenemos, a un vistazo, lo que más le interesa ahora mismo a más de 20 millones de españoles nos da una idea del control de la información y su búsqueda que estamos haciendo, con nuestros usos y nuestros hábitos. Nadie nos ha obligado a nada, en absoluto.

«Empezamos a confundir conveniencia con alegrí­a, abundancia con elección». Y no lo digo, yo lo dice Apple, en una de las mejores expresiones de la identidad corporativa de una empresa que he visto nunca:

Todos usamos productos porque nos identifican con los valores que transmiten: en el caso de Apple yo aprecio que valoren el minimalismo y la sencillez en todo lo que hacen, aprecio que dediquen tiempo y esfuerzo a elaborar un producto de calidad aunque éso suponga un alto precio a pagar y aprecio que «digan mil veces no para cada sí­», porque éso es la esencia del enfoque. Y porque aunque Apple vaya a otra velocidad distinta a la del mercado, estoy seguro que seguirán haciendo productos que mantengan esos mismos criterios. En un mundo en el que el 61% del tráfico de internet es de robots, si echas un vistazo al increí­ble tiempo y esfuerzo gastado en prototipos y personas crear un producto como el iPhone te das cuenta de lo importante de tener una visión propia e independiente a largo plazo de qué es lo correcto, de cómo se forma una montaña.

Cuanto más conozco las montañas más aprecio el sedimento, lo cual no implica en absoluto un discurso ludita en contra de la tecnologí­a, sino en un uso razonable de la tecnologí­a, que implica cierta visión a largo plazo y, sobre todo, foco.

Foco en una visión a largo plazo, en una idea pulida y mejorada a lo largo del tiempo para poder conseguir algo de calidad. Foco en tener que decir ‘no’ a muchas cosas (no a opciones cortoplacistas, no a pensar qué pide el mercado sino si es lo mejor que se puede aportar al mercado, no a tener un criterio que marquen otros), para así­ poder decir que sí­ a otras.

El dilema de iOS

Voy ya por mi segundo modelo de iPhone y reconozco que me siento realmente cómodo con los productos de Apple: tengo también un Macbook Air (mi segundo Mac, después de un Macbook) y en fin, puede decirse que soy uno de esos ‘convencidos’ por Apple para su causa.

Pero la verdad es que también sé reconocer cuando Apple comete un error y creo que lo está cometiendo en el terreno móvil. Voy a intentar explicarme.

De vez en cuando me obsesiono con ciertas cosas y lo cierto es que últimamente sentí­a que tení­a demasiada ‘basura’ instalada en mi iPhone, así­ que me impuse una norma: no pasar de una pantalla de aplicaciones.

Aquello funcionó realmente bien: borré muchas aplicaciones inservibles que no usaba en meses y me quedé con lo esencial, con todo aquello que me parecí­a lo mejor y que podrí­a aprovechar al máximo porque era de la máxima calidad. Pero también encontré un problema: varias aplicaciones preinstaladas del Sistema Operativo que no podí­a borrar y no usaba en absoluto.

¿A qué aplicaciones me refiero? A iTunes, Game Center, Contactos, Música , Brújula, Tiempo, Notas de Voz, Calculadora, Bolsa, Passbook, Reloj, Recordatorios, Mapas y Calendario. ¿Por qué no las uso? Porque uso otras apps de terceros que me parecen mejores, como Spotify, Evernote, Rise, Google Maps, Fantastical, Things o Solar. Y creo que Apple deberí­a entender esta actitud.

En cuanto a ordenadores, Apple ofrece software que sin duda está bien y los consumidores podemos usar, como Keynote o iMovie, pero tenemos otras mil alternativas como Final Cut o Powerpoint, y cada cual es libre de usarlas. Lo que nunca entenderé es que no se puedan desinstalar de iOS esas aplicaciones que, al menos en mi caso, no hacen otra cosa que ocupar espacio.

Creo que Apple deberí­a de dar esa cierta libertad y centrarse mucho más en el hardware y en el Sistema Operativo en general, que es por lo que nos compramos un iPhone (espero que nadie se compre un iPhone por su app para la bolsa), haciendo de iOS de nuevo la experiencia lí­der en el mercado para móviles, cosa que cada vez tiene un poco más en entredicho.

Nota: este artí­culo ha sido escrito con Marsedit, delicioso software para bloggers en Mac.

5 apps para iOS que me han gustado últimamente

íšltimamente he probado algunas aplicaciones interesantes de iOS y aprovecho este post para comentarlas y quitarlas de la lista de ‘pendientes’. Reconozco que cada vez tengo menos aplicaciones en mi iPhone y creo que es tendencia general a usar más el navegador y menos las aplicaciones, pero pese a todo se siguen haciendo muchas aplicaciones interesantes que merece la pena destacar:

  • Cheddar es otro de esos gestores de listas de cosas por hacer pero con sincronización y multiplataforma. Recuerda un poco a Wunderlist pero tiene alguna cosa más y el diseño es realmente bonito.
  • Real Racing para Mac controlado desde iPhone/iPad es algo que no es una aplicación de iPhone al uso, pero me encanta y he descubierto hace relativamente no mucho. Real Racing es un genial juego de carreras para Mac e iOS y ahora se puede, con el juego del Mac, usar el iPhone como volante si están conectados a la misma Wi-Fi y sin necesidad de comprar la app en iOS, pues va todo por el navegador Safari. La experiencia es bastante buena.
  • Byword se ha convertido en mi favorita para escribir textos largos en Mac o desde mi iPhone, pues además lo puedes sincronizar en Dropbox y puedes exportarlo a Tumblr, WordPress y cualquier otra plataforma. Se ha convertido en una imprescindible.
  • WTHR será la app del tiempo favorita para todos los fans de Dieter Rams y del minimalismo, utilitarismo y sencillez en el diseño. El tiempo desde un punto de vista minimalista.
  • Gabi me ha sorprendido gratamente. Digamos que entra dentro de la categorí­a de «Aplicaciones de visualización de información» como pueden ser Flipboard. Si Flipboard se encarga de feeds de información en general, Gabi se encarga exclusivamente de información en tu cuenta de Facebook, jugando además con condicionales. Por ejemplo, cuáles son las fotos de tus amigos más vistas esta semana, pero de una manera realmente bonita. Merece la pena pagar por ella.

A todo esto, una reflexión final: nunca entenderé el hecho de Apple de no dejar en su App Store aplicaciones de juegos de azar o de material adulto, que se pueden encontrar en cualquier sitio de Internet fácilmente. A dí­a de hoy ya se puede jugar al póker desde el móvil en España pero no desde iOS, lo cual es un poco raro teniendo en cuenta que fácilmente en Internet con cualquier navegador se puede jugar a la modalidad Texas Holdem o a cualquier cosa medianamente prohibida en la App Store. ¿Supondrá un cambio esta medida ahora que no está Jobs? Yo apuesto a que sí­, en un futuro no muy lejano. Veremos qué sucede.

Instapaper, nuevas maneras de consumir contenido

De un tiempo a esta parte he comentado en varias ocasiones mis nuevas maneras para consumir información en este 2012.

Querí­a destacar un elemento central que cada vez es más clave en mi vida diaria como lector y recolector de información, que se ha convertido en algo casi imprescindible. Ese algo es Instapaper.

El Instapaper ‘almacén’

El objetivo fundamental de Instapaper es ser el refugio para el contenido que quieras leer pero no puedas en este preciso instante.

Instapaper funciona bien a dos niveles. En un primer lugar, Instapaper es ese lugar donde almacenas todo lo que deseas leer más tarde. Punto. Puede ser por diversos motivos, pero el más básico es porque no tienes tiempo en ese momento para leerlo: estás en el metro, estás en el trabajo o simplemente quieres leerlo más tarde con calma. Instapaper es gratis y desde el momento en que te registras puedes empezar a guardar contenido.

Instapaper es ese lugar donde almacenas todo lo que deseas leer más tarde.

Donde realmente funciona bien Instapaper, al menos bajo mi uso, es gracias a dos cosas: primero gracias al bookmarklet que se instala en la barra de marcadores de cualquier navegador y que permite que con un simple click y en unos segundos tengas esa web guardada para leer más tarde. En segundo lugar su aplicación de iPhone es deliciosa (hay también para Android y otras plataformas). Es una aplicación de pago pero realmente merece la pena cada céntimo de lo que cuesta para leer por lo cómoda que es en esos instantes de «me gustarí­a leer algo ahora y no tengo qué leer» como en los viajes en metro o simplemente por las mañanas en cama. Se ha convertido en una app imprescindible en mi iPhone.

El Instapaper ‘red social’

Si todos los usuarios de Instapaper leen contenido que se supone interesante…¿por qué no compartirlo con amigos en el mismo ecosistema?

Hace no mucho, el creador de Instapaper (Marco Arment, lead developer de Tumblr hasta 2010) decidió hacer algo realmente genial: si todos leemos cosas en Instapaper y tenemos la posibilidad de hacer ‘like’ sobre los mejores artí­culos de Instapaper… ¿Por qué no ver lo que otros amigos han hecho like y así­ descubrir contenido nuevo e interesante?

Sinceramente, sigo a 4 ó 5 personas en Instapaper que me aportan un 90% de los artí­culos que considero útiles para aprender en mi labor profesional a dí­a de hoy. Por ejemplo, estos artí­culos interesantes he encontrado últimamente:

Realmente hay varias cosas interesantes en el ecosistema de likes de Instapaper como la ausencia de perfiles de cada una de las personas ni tampoco la existencia de números de following/followers en Instapaper que tanto drama causan a esta sociedad moderna. Simplemente enchufas tus perfiles de Facebook y Twitter y te dice cuántos de tus contactos usan Instapaper. Si les sigues o les dejas de seguir da igual, ellos no van a recibir notificación ni lo sabrán. Simplemente leerás lo que hace like… ¿Que de eso se trataba en realidad, no?

Me gustarí­a mucho mucho que alguna gente que conozco y que tengo en bastante estima usase Instapaper pues es interesante leer las fuentes de otros y, al fin y al cabo es conocimiento compartido y distribuí­do.

El modelo de Instapaper ha funcionado tan bien que incluso Apple ha hecho un clon para Safari en Windows, Mac e iOS. Todo prácticamente igual salvo la parte social. Justo la mejor.

Disclaimer 1: Obviamente comparto artí­culos en Instapaper. Si me sigues en Twitter supongo que me encontrarás en Instapaper y podrás leer mis likes y los de tus amigos que usen Instapaper.
Disclaimer 2: Cada vez que entro en mi blog a escribir un artí­culo tengo una actualización nueva de WordPress. Me pregunto de qué es sí­ntoma: si es que escribo poco o que en WordPress trabajan mucho.

Una semana probando iOS 6

Desde hace una semana vengo probando iOS 6, la nueva actualización al sistema operativo de Apple para iPhone e iPad. Regreso de vuelta a la calidez (y estabilidad) de iOS 5 para contarlo y ver las cosas negativas y las positivas que va a tener a partir del Otoño de 2012 el cambio a la nueva versión. Si quieres puedes ver ya mismo las principales novedades de iOS 6 en la web de Apple.


Si hay algo a lo que creo todos vamos corriendo a ver nada más actualizar el sistema operativo es a la aplicación nativa de Mapas, que es hija del divorcio entre Google y Apple, pues a partir de iOS 6 los datos cartográficos son de Apple y no servidos por Google. Y sí­, es cierto, todos hemos pensado lo mismo: espero que Google tenga una app aparte para mapas en iOS, y todo pinta a que sí­. Los mapas son distintos y pierdes funcionalidades como Street View o todo el tema del transporte urbano, algo que en ciudades grandes como Madrid, así­ como la calidad del mapa en sí­, que deja un poco que desear. Además, en mi caso y al ser un iPhone 4, no tení­a todas las funcionalidades activadas. Mapas es, al menos en la Beta 1 de iOS 6, la parte más decepcionante de todas las novedades presentadas hasta el momento. Nadie dijo que fuese fácil ni corto divorciarse de Google.

Si hay algo que se nota en iOS 6 es una clara tendencia hacia la privacidad y el filtrado de información, algo que es realmente importante en estos dí­as. En Apple han debido escarmentar un poco tras aquella polémica con las antenas y el guardado de datos de localización en iOS hasta el punto de que prácticamente cualquier aplicación ahora te pregunta si quieres darle acceso a tus datos de localización, contactos, o cualquier cosa a la que intente acceder. Además, iOS 6 tiene dos temas bastante interesantes: una bandeja de entrada VIP para el email (solo los remitentes que tú quieras aparecen ahí­) y un modo «reuniones» mediante el cual solo sonarán las llamadas de teléfono de tus contactos favoritos o bien si es un teléfono no-favorito y llama más de dos veces en tres minutos. En el tema de llamadas además, aparte de colgar ahora puedes contestar con un SMS predefinido, lo cual se agradecerá en más de una ocasión si no se puede contestar.

Hay una cosa que no me gusta, y es la excesiva tendencia a tener apps propias de iOS que no puedes eliminar: aplicaciones nuevas como Passbook, que es muy prometedora pero en esta beta 1 de iOS 6 al menos no sirve absolutamente para nada pues es solo una pantalla. Igual sucede con Quiosco en iOS 5, con el agravante de que es una carpeta y que, a no ser que hagas alguna triquiñuela bastante especial, no consigues meterla en una carpeta y menos aún eliminarla. Me molesta el tema de tener apps «inútiles» como Brújula en una compañí­a que supuestamente apuesta por la sencillez y el minimalismo como Apple; de hecho creo que ya tengo más apps «de sistema» que apps normales. Es preocupante y parece que va a peor: Podcasts será una app separada de Música en iOS 6.

Otro tema que me preocupa un poco es el tema de la fragmentación, pues hay muchas novedades como por ejemplo Siri en Español o la navegación paso a paso en Mapas que solo se pueden disfrutar a partir del iPhone 4S, lo cual es un poco complicado de explicar teniendo en cuenta que funciona bien en el iPhone 4 y que no es un terminal tan antiguo.


En resumen: no me ha convencido especialmente iOS 6 al primer toque. Sin duda, trae algunas novedades bastante interesantes, pero en muchos casos solo si tienes un iPhone 4S o un iPad última generación, lo cual es decepcionante para un porcentaje muy alto de la gente que usa iOS, me temo. Recomiendo leer también a week with ios six (technochocolate) donde otro usuario comenta también su semana usando iOS 6 y entronca con una idea que muchos empezamos a sospechar: Apple implementa en iOS la misma técnica que con Mac OS X, ir alternando una gran actualización del Sistema Operativo con una menor. E iOS 6 es una actualización menor, como Snow Leopard o Snow Lion fueron actualizaciones menores de Mac OS X.

Creo que a medida que se acerque el lanzamiento en Otoño veremos nuevas mejoras, tanto por la parte de integración con iCloud/Mac OS X Mountain Lion que promete mucho como por la parte de las nuevas API que permitirán a los desarrolladores elaborar mejores aplicaciones. iOS seguro que seguirá dando que hablar por una temporada.

Heineken Star Player, uniendo lo offline con lo online

Me parece realmente chula la integración que han hecho en Heineken para unir algo tan tradicionalmente offline como ver el fútbol entre amigos y convertirlo en algo online a través de una app de iPhone como Heineken Star Player.

Creo que todo este tema de aplicaciones que funcionan de ‘segunda pantalla’ mientras ves la TV y tienes un iPhone (aunque suele ser mejor un iPad) a mano están en pleno boom. Recomiendo mucho este post de José de Isasa: ¿Qué haces mientras ves la tele?

John Gruber, el primer blogger de Apple?

Con la reciente muerte de Steve Jobs muchos nos preguntábamos qué podrí­a cambiar en Apple, ya dando por seguro que indiscutiblemente existirí­an cosas que cambiarí­an. Y hoy Jueves hemos tenido la primera sorpresa.

John Gruber y Daring Fireball

John Gruber es el autor del blog Daring Fireball, un blog escrito desde 2002 donde escribe sobre el estado de la tecnologí­a, enfocándolo de unos años a esta parte más bien en «la tecnologí­a desde el punto de vista de un fan de Apple«.

Por tanto, creo que no me arriesgo mucho si afirmo que para muchos Daring Fireball supone algo así­ como el #1 de los blogs no oficiales de Apple. Ha marcado un estilo de escribir distinto, especialmente cuando cita noticias de otros y ha sacado adelante proyectos realmente interesantes como Markdown, por lo cual te podrá gustar más o menos pero ahí­ están sus hechos.


Pongámonos en el dí­a de hoy, Jueves 16 de Enero de 2012: Apple saca a la luz OS X Mountain Lion, una nueva versión de su sistema operativo para ordenadores de sobremesa y portátiles, mejorando la ‘integración’ con iOS y asimilando muchas cosas que funcionan a la perfección en iPhones, iPads y iPods Touch. Reconozcámoslo: nos ha pillado a todos por sorpresa, porque algo así­ era previsible pero no habí­a apenas rumores al respecto sobre qué cosas podí­an sacar. Veremos si ha sido casualidad o realmente algo está cambiando en Apple sobre las filtraciones. Y yo me alegro de que nos vuelvan a conseguir sorprender.


¿Y qué pinta el bueno de Gruber en todo esto? Que hoy publica un artí­culo llamado Mountain Lion, donde cuenta que hace una semana estaba en Manhattan con Phil Schiller y varios altos cargos de Apple que, tras hacerle firmar estrictos acuerdos de confidencialidad, le mostraron en exclusiva lo que han enseñado hoy, una nueva versión del Sistema Operativo de Apple, OS X Mountain Lion. En un salón de un hotel, como de una «keynote» de las que hací­a Steve Jobs de antaño pero solo para un periodista, en completa exclusiva, a condición de que no dijese nada hasta que ellos lo hiciesen público. Además, le entregaron un Macbook Air con el Sistema Operativo instalado para que pudiese probarlo (desde hoy se permite la descarga para desarrolladores).

Ok, es Apple, es una empresa tecnológica, y John Gruber tiene un blog con 4 millones de páginas vistas al mes y 400.000 suscriptores por RSS. Para que os hagáis una idea: Xataka en España ha tenido en Diciembre 2011 14 millones de páginas vistas (más del triple) y supongo que también más por RSS. Los datos de Xataka los publica WeblogsSL/Comscore y los de Gruber, quizá desactualizados, los publica en su blog.

Sea como fuere, y lo ha dicho Phil Schiller (Apple) según John Gruber en el artí­culo, «we’re doing some things differently now. Estamos viviendo cómo cambia Apple, una empresa abierta más o menos a prensa pero cerrada de alguna manera para bloggers (llegando al lí­mite de la polémica con Gizmodo por aquel prototipo de un iPhone) si bien habí­a habido algún acercamiento en casos concretos pero sin llegar a este punto de hacer una ‘Keynote’ especial para un blogger de tecnologí­a, elevándolo más allá de otros tradicionales gurús de esto en USA como, por ejemplo, David Pogue.

«We’re doing some things differently now.» (Phil Schiller)

Sinceramente, estoy bastante sorprendido por lo que ha presentado Apple y creo que más aún por cómo lo ha hecho, por cómo parecen estar cambiando las cosas y como, al fin y al cabo, se han dado cuenta de que algunos blogs están quitándole terreno, audiencia y respeto a muchos periodistas tradicionales de columna en prensa escrita, por decir algo. ¿Tendremos más sucesos similares en el futuro? ¿Realmente están cambiando las cosas dentro de Apple tras la muerte de Jobs?

Mi ciclo para consumir información (2012)

Un dolor de cabeza ‘de siempre’ de cualquier usuario medianamente intensivo de Internet es el de qué hacer con toda esa información que nos encontramos y cómo gestionarla y utilizarla. Llevo años probando mil cosas, desde GTD a Bloglines pasando por Read it Later, Evernote, Ifttt o Google Reader con sus starred, pero algo que llevo probando unos meses con bastantes buenos resultados es lo siguiente: Instapaper + Pinboard + Timely. ¿Cómo?

  • En el momento en el que encuentro información que quiero leer más tarde lo mando directamente a Instapaper. Me gusta mucho más que Read it Later por su sencillez, agilidad y versatilidad, así­ como por estar soportado por todos los programas que uso habitualmente en el iPhone, especialmente Tweetbot, Flipboard y Zite, así­ como un bookmarklet que se puede añadir a Safari en el iPhone y resulta muy útil.
  • Reconozco también que rara vez leo algo al momento, a no ser que sea algo realmente urgente, ante lo cual diferencio dos momentos distintos: el momento en el que leo algo y el momento en el que echo un vistazo y voy mandando cosas a Instapaper.
  • Cuando tengo un bloque de tiempo amplio y puedo dedicarlo a leer algo (normalmente a primerí­sima hora o a última hora), entro en Instapaper, leo los elementos que tengo pendientes y ahí­ tomo tres decisiones: descartarlo, tuitearlo (Timely me lo programa para el mejor momento al dí­a siguiente) o guardarlo en el archivo (Pinboard va de fábula).
  • Diferencio dos momentos distintos: el momento en el que leo algo y el momento en el que echo un vistazo y voy mandando cosas a Instapaper.

  • Y sí­, yo era de los que usaba Delicious pero creo que con tanto relanzamiento le han metido tantas cosas que lo han destrozado y dejado como algo inútil cuando precisamente es lo último que necesito a la hora de gestionar información. Y justo Pinboard me recuerda al Delicious de hace años, así­ que exporté todo y lo uso siempre.
  • Uso siempre bookmarklets para guardar información y no lo hago con extensiones, me parece mucho más cómodo. Y sí­, suelo tener a cero Instapaper porque intento revisarlo a fondo todas las semanas para dejarlo a cero por si queda algo pendiente.