El dilema de iOS

Voy ya por mi segundo modelo de iPhone y reconozco que me siento realmente cómodo con los productos de Apple: tengo también un Macbook Air (mi segundo Mac, después de un Macbook) y en fin, puede decirse que soy uno de esos ‘convencidos’ por Apple para su causa.

Pero la verdad es que también sé reconocer cuando Apple comete un error y creo que lo está cometiendo en el terreno móvil. Voy a intentar explicarme.

De vez en cuando me obsesiono con ciertas cosas y lo cierto es que últimamente sentí­a que tení­a demasiada ‘basura’ instalada en mi iPhone, así­ que me impuse una norma: no pasar de una pantalla de aplicaciones.

Aquello funcionó realmente bien: borré muchas aplicaciones inservibles que no usaba en meses y me quedé con lo esencial, con todo aquello que me parecí­a lo mejor y que podrí­a aprovechar al máximo porque era de la máxima calidad. Pero también encontré un problema: varias aplicaciones preinstaladas del Sistema Operativo que no podí­a borrar y no usaba en absoluto.

¿A qué aplicaciones me refiero? A iTunes, Game Center, Contactos, Música , Brújula, Tiempo, Notas de Voz, Calculadora, Bolsa, Passbook, Reloj, Recordatorios, Mapas y Calendario. ¿Por qué no las uso? Porque uso otras apps de terceros que me parecen mejores, como Spotify, Evernote, Rise, Google Maps, Fantastical, Things o Solar. Y creo que Apple deberí­a entender esta actitud.

En cuanto a ordenadores, Apple ofrece software que sin duda está bien y los consumidores podemos usar, como Keynote o iMovie, pero tenemos otras mil alternativas como Final Cut o Powerpoint, y cada cual es libre de usarlas. Lo que nunca entenderé es que no se puedan desinstalar de iOS esas aplicaciones que, al menos en mi caso, no hacen otra cosa que ocupar espacio.

Creo que Apple deberí­a de dar esa cierta libertad y centrarse mucho más en el hardware y en el Sistema Operativo en general, que es por lo que nos compramos un iPhone (espero que nadie se compre un iPhone por su app para la bolsa), haciendo de iOS de nuevo la experiencia lí­der en el mercado para móviles, cosa que cada vez tiene un poco más en entredicho.

Nota: este artí­culo ha sido escrito con Marsedit, delicioso software para bloggers en Mac.