Escribo mi primer post de 2014 (algo más de 8 años blogueando, sí que pasa el tiempo) en medio de varios problemas tecnológicos en mi entorno más cercano: un Android barato que cada rato empieza a pitar indiscriminadamente y que indica que se está cargando (aunque no lo esté) y un PC que se conecta a internet mediante un PLC que, cuando menos te lo esperas, se resetea y te deja sin conexión.
Hace poco me compré un iPad Mini Retina, desde el que estoy escribiendo este post. Tuve un problema al recibir el iPad y, tras llamar a Apple, me ofrecieron enviarme otro iPad idéntico, que me llegó en 24 horas, y tener 5 días de plazo para mover la información de un iPad a otro, sin ningún coste para mí, ni siquiera de mensajería. No necesité los 5 días: había olvidado que, al tener iCloud, los dispositivos de iOS hacen copia de seguridad cuando los dejo enchufados a la corriente y con WiFi (es decir, cuando los cargo al ir a dormir) y, por tanto, nada más configurar mi nuevo iPad, actualizó todas sus configuraciones y programas tal y como estaba en el iPad original. Fue increíblemente sencillo y veloz.
Pagar más por un dispositivo Apple (aunque los estudios demuestren que no es del todo cierto) hace que en muchos casos te despreocupes de otras cosas y sientas que solo tienes que preocuparte no ya de la tecnología sino de lo que haces con la tecnología, que es en realidad como debería ser todo. Y ya cuando lees libros como la biografía de Jonathan Ive te das cuenta de la cantidad de dinero que se gasta una empresa como Apple en innovar (Apple fue criticada por ser la primera en quitar los diskettes y apostar por cd’s, la primera en apostar por el wifi y quitar los ethernet, etc…) y en hacer tecnología que funciona.
Imagino que, como con todo, serán puntos de vista, pero yo lo tengo bastante claro.
Voy ya por mi segundo modelo de iPhone y reconozco que me siento realmente cómodo con los productos de Apple: tengo también un Macbook Air (mi segundo Mac, después de un Macbook) y en fin, puede decirse que soy uno de esos ‘convencidos’ por Apple para su causa.
Pero la verdad es que también sé reconocer cuando Apple comete un error y creo que lo está cometiendo en el terreno móvil. Voy a intentar explicarme.
De vez en cuando me obsesiono con ciertas cosas y lo cierto es que últimamente sentía que tenía demasiada ‘basura’ instalada en mi iPhone, así que me impuse una norma: no pasar de una pantalla de aplicaciones.
Aquello funcionó realmente bien: borré muchas aplicaciones inservibles que no usaba en meses y me quedé con lo esencial, con todo aquello que me parecía lo mejor y que podría aprovechar al máximo porque era de la máxima calidad. Pero también encontré un problema: varias aplicaciones preinstaladas del Sistema Operativo que no podía borrar y no usaba en absoluto.
¿A qué aplicaciones me refiero? A iTunes, Game Center, Contactos, Música , Brújula, Tiempo, Notas de Voz, Calculadora, Bolsa, Passbook, Reloj, Recordatorios, Mapas y Calendario. ¿Por qué no las uso? Porque uso otras apps de terceros que me parecen mejores, como Spotify, Evernote, Rise, Google Maps, Fantastical, Things o Solar. Y creo que Apple debería entender esta actitud.
En cuanto a ordenadores, Apple ofrece software que sin duda está bien y los consumidores podemos usar, como Keynote o iMovie, pero tenemos otras mil alternativas como Final Cut o Powerpoint, y cada cual es libre de usarlas. Lo que nunca entenderé es que no se puedan desinstalar de iOS esas aplicaciones que, al menos en mi caso, no hacen otra cosa que ocupar espacio.
Creo que Apple debería de dar esa cierta libertad y centrarse mucho más en el hardware y en el Sistema Operativo en general, que es por lo que nos compramos un iPhone (espero que nadie se compre un iPhone por su app para la bolsa), haciendo de iOS de nuevo la experiencia líder en el mercado para móviles, cosa que cada vez tiene un poco más en entredicho.
Nota: este artículo ha sido escrito con Marsedit, delicioso software para bloggers en Mac.
íšltimamente he probado algunas aplicaciones interesantes de iOS y aprovecho este post para comentarlas y quitarlas de la lista de ‘pendientes’. Reconozco que cada vez tengo menos aplicaciones en mi iPhone y creo que es tendencia general a usar más el navegador y menos las aplicaciones, pero pese a todo se siguen haciendo muchas aplicaciones interesantes que merece la pena destacar:
Cheddar es otro de esos gestores de listas de cosas por hacer pero con sincronización y multiplataforma. Recuerda un poco a Wunderlist pero tiene alguna cosa más y el diseño es realmente bonito.
Real Racing para Mac controlado desde iPhone/iPad es algo que no es una aplicación de iPhone al uso, pero me encanta y he descubierto hace relativamente no mucho. Real Racing es un genial juego de carreras para Mac e iOS y ahora se puede, con el juego del Mac, usar el iPhone como volante si están conectados a la misma Wi-Fi y sin necesidad de comprar la app en iOS, pues va todo por el navegador Safari. La experiencia es bastante buena.
Byword se ha convertido en mi favorita para escribir textos largos en Mac o desde mi iPhone, pues además lo puedes sincronizar en Dropbox y puedes exportarlo a Tumblr, WordPress y cualquier otra plataforma. Se ha convertido en una imprescindible.
WTHR será la app del tiempo favorita para todos los fans de Dieter Rams y del minimalismo, utilitarismo y sencillez en el diseño. El tiempo desde un punto de vista minimalista.
Gabi me ha sorprendido gratamente. Digamos que entra dentro de la categoría de «Aplicaciones de visualización de información» como pueden ser Flipboard. Si Flipboard se encarga de feeds de información en general, Gabi se encarga exclusivamente de información en tu cuenta de Facebook, jugando además con condicionales. Por ejemplo, cuáles son las fotos de tus amigos más vistas esta semana, pero de una manera realmente bonita. Merece la pena pagar por ella.
A todo esto, una reflexión final: nunca entenderé el hecho de Apple de no dejar en su App Store aplicaciones de juegos de azar o de material adulto, que se pueden encontrar en cualquier sitio de Internet fácilmente. A día de hoy ya se puede jugar al póker desde el móvil en España pero no desde iOS, lo cual es un poco raro teniendo en cuenta que fácilmente en Internet con cualquier navegador se puede jugar a la modalidad Texas Holdem o a cualquier cosa medianamente prohibida en la App Store. ¿Supondrá un cambio esta medida ahora que no está Jobs? Yo apuesto a que sí, en un futuro no muy lejano. Veremos qué sucede.
Quería destacar un elemento central que cada vez es más clave en mi vida diaria como lector y recolector de información, que se ha convertido en algo casi imprescindible. Ese algo es Instapaper.
El Instapaper ‘almacén’
El objetivo fundamental de Instapaper es ser el refugio para el contenido que quieras leer pero no puedas en este preciso instante.
Instapaper funciona bien a dos niveles. En un primer lugar, Instapaper es ese lugar donde almacenas todo lo que deseas leer más tarde. Punto. Puede ser por diversos motivos, pero el más básico es porque no tienes tiempo en ese momento para leerlo: estás en el metro, estás en el trabajo o simplemente quieres leerlo más tarde con calma. Instapaper es gratis y desde el momento en que te registras puedes empezar a guardar contenido.
Instapaper es ese lugar donde almacenas todo lo que deseas leer más tarde.
Donde realmente funciona bien Instapaper, al menos bajo mi uso, es gracias a dos cosas: primero gracias al bookmarklet que se instala en la barra de marcadores de cualquier navegador y que permite que con un simple click y en unos segundos tengas esa web guardada para leer más tarde. En segundo lugar su aplicación de iPhone es deliciosa (hay también para Android y otras plataformas). Es una aplicación de pago pero realmente merece la pena cada céntimo de lo que cuesta para leer por lo cómoda que es en esos instantes de «me gustaría leer algo ahora y no tengo qué leer» como en los viajes en metro o simplemente por las mañanas en cama. Se ha convertido en una app imprescindible en mi iPhone.
El Instapaper ‘red social’
Si todos los usuarios de Instapaper leen contenido que se supone interesante…¿por qué no compartirlo con amigos en el mismo ecosistema?
Hace no mucho, el creador de Instapaper (Marco Arment, lead developer de Tumblr hasta 2010) decidió hacer algo realmente genial: si todos leemos cosas en Instapaper y tenemos la posibilidad de hacer ‘like’ sobre los mejores artículos de Instapaper… ¿Por qué no ver lo que otros amigos han hecho like y así descubrir contenido nuevo e interesante?
Sinceramente, sigo a 4 ó 5 personas en Instapaper que me aportan un 90% de los artículos que considero útiles para aprender en mi labor profesional a día de hoy. Por ejemplo, estos artículos interesantes he encontrado últimamente:
Realmente hay varias cosas interesantes en el ecosistema de likes de Instapaper como la ausencia de perfiles de cada una de las personas ni tampoco la existencia de números de following/followers en Instapaper que tanto drama causan a esta sociedad moderna. Simplemente enchufas tus perfiles de Facebook y Twitter y te dice cuántos de tus contactos usan Instapaper. Si les sigues o les dejas de seguir da igual, ellos no van a recibir notificación ni lo sabrán. Simplemente leerás lo que hace like… ¿Que de eso se trataba en realidad, no?
Me gustaría mucho mucho que alguna gente que conozco y que tengo en bastante estima usase Instapaper pues es interesante leer las fuentes de otros y, al fin y al cabo es conocimiento compartido y distribuído.
Disclaimer 1: Obviamente comparto artículos en Instapaper. Si me sigues en Twitter supongo que me encontrarás en Instapaper y podrás leer mis likes y los de tus amigos que usen Instapaper. Disclaimer 2: Cada vez que entro en mi blog a escribir un artículo tengo una actualización nueva de WordPress. Me pregunto de qué es síntoma: si es que escribo poco o que en WordPress trabajan mucho.
Desde hace una semana vengo probando iOS 6, la nueva actualización al sistema operativo de Apple para iPhone e iPad. Regreso de vuelta a la calidez (y estabilidad) de iOS 5 para contarlo y ver las cosas negativas y las positivas que va a tener a partir del Otoño de 2012 el cambio a la nueva versión. Si quieres puedes ver ya mismo las principales novedades de iOS 6 en la web de Apple.
Si hay algo a lo que creo todos vamos corriendo a ver nada más actualizar el sistema operativo es a la aplicación nativa de Mapas, que es hija del divorcio entre Google y Apple, pues a partir de iOS 6 los datos cartográficos son de Apple y no servidos por Google. Y sí, es cierto, todos hemos pensado lo mismo: espero que Google tenga una app aparte para mapas en iOS, y todo pinta a que sí. Los mapas son distintos y pierdes funcionalidades como Street View o todo el tema del transporte urbano, algo que en ciudades grandes como Madrid, así como la calidad del mapa en sí, que deja un poco que desear. Además, en mi caso y al ser un iPhone 4, no tenía todas las funcionalidades activadas. Mapas es, al menos en la Beta 1 de iOS 6, la parte más decepcionante de todas las novedades presentadas hasta el momento. Nadie dijo que fuese fácil ni corto divorciarse de Google.
Si hay algo que se nota en iOS 6 es una clara tendencia hacia la privacidad y el filtrado de información, algo que es realmente importante en estos días. En Apple han debido escarmentar un poco tras aquella polémica con las antenas y el guardado de datos de localización en iOS hasta el punto de que prácticamente cualquier aplicación ahora te pregunta si quieres darle acceso a tus datos de localización, contactos, o cualquier cosa a la que intente acceder. Además, iOS 6 tiene dos temas bastante interesantes: una bandeja de entrada VIP para el email (solo los remitentes que tú quieras aparecen ahí) y un modo «reuniones» mediante el cual solo sonarán las llamadas de teléfono de tus contactos favoritos o bien si es un teléfono no-favorito y llama más de dos veces en tres minutos. En el tema de llamadas además, aparte de colgar ahora puedes contestar con un SMS predefinido, lo cual se agradecerá en más de una ocasión si no se puede contestar.
Hay una cosa que no me gusta, y es la excesiva tendencia a tener apps propias de iOS que no puedes eliminar: aplicaciones nuevas como Passbook, que es muy prometedora pero en esta beta 1 de iOS 6 al menos no sirve absolutamente para nada pues es solo una pantalla. Igual sucede con Quiosco en iOS 5, con el agravante de que es una carpeta y que, a no ser que hagas alguna triquiñuela bastante especial, no consigues meterla en una carpeta y menos aún eliminarla. Me molesta el tema de tener apps «inútiles» como Brújula en una compañía que supuestamente apuesta por la sencillez y el minimalismo como Apple; de hecho creo que ya tengo más apps «de sistema» que apps normales. Es preocupante y parece que va a peor: Podcasts será una app separada de Música en iOS 6.
Otro tema que me preocupa un poco es el tema de la fragmentación, pues hay muchas novedades como por ejemplo Siri en Español o la navegación paso a paso en Mapas que solo se pueden disfrutar a partir del iPhone 4S, lo cual es un poco complicado de explicar teniendo en cuenta que funciona bien en el iPhone 4 y que no es un terminal tan antiguo.
En resumen: no me ha convencido especialmente iOS 6 al primer toque. Sin duda, trae algunas novedades bastante interesantes, pero en muchos casos solo si tienes un iPhone 4S o un iPad última generación, lo cual es decepcionante para un porcentaje muy alto de la gente que usa iOS, me temo. Recomiendo leer también a week with ios six (technochocolate) donde otro usuario comenta también su semana usando iOS 6 y entronca con una idea que muchos empezamos a sospechar: Apple implementa en iOS la misma técnica que con Mac OS X, ir alternando una gran actualización del Sistema Operativo con una menor. E iOS 6 es una actualización menor, como Snow Leopard o Snow Lion fueron actualizaciones menores de Mac OS X.
Creo que a medida que se acerque el lanzamiento en Otoño veremos nuevas mejoras, tanto por la parte de integración con iCloud/Mac OS X Mountain Lion que promete mucho como por la parte de las nuevas API que permitirán a los desarrolladores elaborar mejores aplicaciones. iOS seguro que seguirá dando que hablar por una temporada.
Con la reciente muerte de Steve Jobs muchos nos preguntábamos qué podría cambiar en Apple, ya dando por seguro que indiscutiblemente existirían cosas que cambiarían. Y hoy Jueves hemos tenido la primera sorpresa.
John Gruber y Daring Fireball
John Gruber es el autor del blog Daring Fireball, un blog escrito desde 2002 donde escribe sobre el estado de la tecnología, enfocándolo de unos años a esta parte más bien en «la tecnología desde el punto de vista de un fan de Apple«.
Por tanto, creo que no me arriesgo mucho si afirmo que para muchos Daring Fireball supone algo así como el #1 de los blogs no oficiales de Apple. Ha marcado un estilo de escribir distinto, especialmente cuando cita noticias de otros y ha sacado adelante proyectos realmente interesantes como Markdown, por lo cual te podrá gustar más o menos pero ahí están sus hechos.
Pongámonos en el día de hoy, Jueves 16 de Enero de 2012: Apple saca a la luz OS X Mountain Lion, una nueva versión de su sistema operativo para ordenadores de sobremesa y portátiles, mejorando la ‘integración’ con iOS y asimilando muchas cosas que funcionan a la perfección en iPhones, iPads y iPods Touch. Reconozcámoslo: nos ha pillado a todos por sorpresa, porque algo así era previsible pero no había apenas rumores al respecto sobre qué cosas podían sacar. Veremos si ha sido casualidad o realmente algo está cambiando en Apple sobre las filtraciones. Y yo me alegro de que nos vuelvan a conseguir sorprender.
¿Y qué pinta el bueno de Gruber en todo esto? Que hoy publica un artículo llamado Mountain Lion, donde cuenta que hace una semana estaba en Manhattan con Phil Schiller y varios altos cargos de Apple que, tras hacerle firmar estrictos acuerdos de confidencialidad, le mostraron en exclusiva lo que han enseñado hoy, una nueva versión del Sistema Operativo de Apple, OS X Mountain Lion. En un salón de un hotel, como de una «keynote» de las que hacía Steve Jobs de antaño pero solo para un periodista, en completa exclusiva, a condición de que no dijese nada hasta que ellos lo hiciesen público. Además, le entregaron un Macbook Air con el Sistema Operativo instalado para que pudiese probarlo (desde hoy se permite la descarga para desarrolladores).
Ok, es Apple, es una empresa tecnológica, y John Gruber tiene un blog con 4 millones de páginas vistas al mes y 400.000 suscriptores por RSS. Para que os hagáis una idea: Xataka en España ha tenido en Diciembre 2011 14 millones de páginas vistas (más del triple) y supongo que también más por RSS. Los datos de Xataka los publica WeblogsSL/Comscore y los de Gruber, quizá desactualizados, los publica en su blog.
Sea como fuere, y lo ha dicho Phil Schiller (Apple) según John Gruber en el artículo, «we’re doing some things differently now. Estamos viviendo cómo cambia Apple, una empresa abierta más o menos a prensa pero cerrada de alguna manera para bloggers (llegando al límite de la polémica con Gizmodo por aquel prototipo de un iPhone) si bien había habido algún acercamiento en casos concretos pero sin llegar a este punto de hacer una ‘Keynote’ especial para un blogger de tecnología, elevándolo más allá de otros tradicionales gurús de esto en USA como, por ejemplo, David Pogue.
«We’re doing some things differently now.» (Phil Schiller)
Sinceramente, estoy bastante sorprendido por lo que ha presentado Apple y creo que más aún por cómo lo ha hecho, por cómo parecen estar cambiando las cosas y como, al fin y al cabo, se han dado cuenta de que algunos blogs están quitándole terreno, audiencia y respeto a muchos periodistas tradicionales de columna en prensa escrita, por decir algo. ¿Tendremos más sucesos similares en el futuro? ¿Realmente están cambiando las cosas dentro de Apple tras la muerte de Jobs?
Y es algo en lo que cada vez insisto más: siempre se sigue aprendiendo de los errores y de hecho yo al menos siempre he aprendido más de los errores que de las cosas que he hecho bien, que te traen otras muchas cosas pero de las que nunca aprendes gran cosa.
Mi último error fue ayer; tenía que dar una pequeña charla y lo tenía todo listo tal y como suelo hacerlo últimamente: usar Keynote en un Macbook y tirar de Keynote Remote en el iPhone para pasar las diapositivas, básicamente porque permite mostrar anotaciones de cada diapositiva en el iPhone y así no me pierdo en el guión de la presentación. También Keynote tiene un modo de «Vista de presentador», pero si estás moviéndote un poco ya pierdes el portátil de vista, así que se vuelve un poco inútil a veces…
Total, que tenía todo preparado –y en este tipo de cosas especialmente no me gusta dejar nada abierto a imprevistos– hasta que llegué a la sala donde tenía que dar la charla…y comprobé que ya estaba lista mi presentación en otro ordenador (se la había pasado con anterioridad en PDF) y que tenía que empezar ya, nada más llegar, pues tomaba el relevo a otra persona que estaba hablando antes.
¿Qué hacer? ¿Abrir el portátil aunque solo sea para leer? No. Por suerte tenía bastante memorizado el guión y al final creo que no me dejé nada, pero me he llevado una pequeña lección: llevar una hoja con las anotaciones del guión, por si las moscas…
Un dolor de cabeza ‘de siempre’ de cualquier usuario medianamente intensivo de Internet es el de qué hacer con toda esa información que nos encontramos y cómo gestionarla y utilizarla. Llevo años probando mil cosas, desde GTD a Bloglines pasando por Read it Later, Evernote, Ifttt o Google Reader con sus starred, pero algo que llevo probando unos meses con bastantes buenos resultados es lo siguiente: Instapaper + Pinboard + Timely. ¿Cómo?
En el momento en el que encuentro información que quiero leer más tarde lo mando directamente a Instapaper. Me gusta mucho más que Read it Later por su sencillez, agilidad y versatilidad, así como por estar soportado por todos los programas que uso habitualmente en el iPhone, especialmente Tweetbot, Flipboard y Zite, así como un bookmarklet que se puede añadir a Safari en el iPhone y resulta muy útil.
Reconozco también que rara vez leo algo al momento, a no ser que sea algo realmente urgente, ante lo cual diferencio dos momentos distintos: el momento en el que leo algo y el momento en el que echo un vistazo y voy mandando cosas a Instapaper.
Cuando tengo un bloque de tiempo amplio y puedo dedicarlo a leer algo (normalmente a primerísima hora o a última hora), entro en Instapaper, leo los elementos que tengo pendientes y ahí tomo tres decisiones: descartarlo, tuitearlo (Timely me lo programa para el mejor momento al día siguiente) o guardarlo en el archivo (Pinboard va de fábula).
Diferencio dos momentos distintos: el momento en el que leo algo y el momento en el que echo un vistazo y voy mandando cosas a Instapaper.
Y sí, yo era de los que usaba Delicious pero creo que con tanto relanzamiento le han metido tantas cosas que lo han destrozado y dejado como algo inútil cuando precisamente es lo último que necesito a la hora de gestionar información. Y justo Pinboard me recuerda al Delicious de hace años, así que exporté todo y lo uso siempre.
Uso siempre bookmarklets para guardar información y no lo hago con extensiones, me parece mucho más cómodo. Y sí, suelo tener a cero Instapaper porque intento revisarlo a fondo todas las semanas para dejarlo a cero por si queda algo pendiente.
Últimamente, especialmente de cara a las Navidades, me pregunta mucha gente cercana sobre si comprarse un iPhone o un teléfono Android. Siempre digo que voy por mi segundo iPhone: tuve un 3GS negro y ahora tengo un 4 blanco y no puedo estar más contento de tanto uno como otro. Cuando respondo que Android no me gusta me suelen preguntar las razones, así que sirva este post como recopilatorio:
Android no ha aportado nada nuevo.
Para muestra tan solo una imagen; así era Android antes de salir el iPhone y así es después:
Android me recuerda mucho al estilo de Sistema Operativo para móviles antes de iOS, cuando Symbian reinaba de alguna manera: cientos de aplicaciones cutres, muchas tonterías sin algún interés y cero apoyo para innovar y hacer cosas distintas.
Android apenas tiene aplicaciones interesantes.
Sin duda: Android tiene aplicaciones como Dropbox, Evernote, Twitter o las típicas aplicaciones multiplataforma pero… ¿Destaca Android por alguna app? Hablo de apps de iOS como Instagram (que pronto estará en Android, parece) o cualquier otra app con un diseño bonito y que realmente merece la pena (Tweetbot, etc…).
El problema de Android es que no ha sabido conquistar a los desarrolladores. ¿Por qué? Por muchos motivos: para empezar porque los usuarios de Android no suelen pagar por aplicaciones mientras que los de iPhone sí. Para que te hagas una idea: Tan solo dos aplicaciones de pago de Android se han descargado más de 500.000 veces en todo el mundo desde 2009, mientras que 6 aplicaciones de pago de iOS lo han hecho tan solo en Marzo y Abril de 2011 en USA.
Quizá sea el modelo de beneficios o quizá tan solo este tema, pero la cosa es que, por ejemplo con las marcas, prevalece mucho antes el desarrollo para iPhone que para Android, al igual que cientos de empresas pequeñas de desarrollo que hacen aplicaciones realmente interesantes, y vuelvo a citar Instagram como ejemplo. Lo impagable viene cuando buscas un post de 10 aplicaciones imprescindibles de Android y en primer lugar encuentras… ¡Un antivirus!
Android presume de mejor hardware…pero nunca va afinado.
Esta diatriba en hardware de Android vs. iPhone es una batalla idéntica a la de PC vs. Mac, y todo se resume en que Apple fabrica su software y su hardware mientras que el resto no: tiene sus ventajas y sus inconvenientes pero sin duda que el sistema vaya como un tiro ayuda mucho en tu vida diaria.
En Android tienes que pelearte con ROMs, con que la pantalla no va tan fluída como debería (y en algunos casos incluso con un procesador más potente que el iPhone, que ya tiene tela), con que se cuelga, con que las actualizaciones tardan en llegar porque cada fabricante las va soltando cuando le place (Apple las suelta en cuanto está porque es el que fabrica el Sistema Operativo, faltaría más) y con mil historias que te recuerdan a las peores batallas que puedes llegar a tener con Windows. Lo dijo Steve Jobs y lo solemos decir los maqueros: «Simplemente funciona». Te olvidas de preocupaciones.
Es de nuevo un símil con la lucha PC-Mac: por un lado unos que presumen de tenerla más larga mientras otros defienden que con un hardware similar obtienen un rendimiento mejor porque todo está mucho más optimizado al fabricar a la vez hardware y software.
Me ha sorprendido hoy el caso de alguien cercano que se ha comprado un Samsung Galaxy SII, uno más de los eternamente llamados iPhone Killer (que a ver si aciertan alguna vez). íbamos a meter la SIM cuando reparamos en que era prácticamente imposible abrir la parte trasera, hasta el punto de ceder en el intento y buscar en Google; justo ahí nos dimos cuenta en que no debíamos ser los únicos:
Pero sobre el caos reinante en el hardware de Android para muestra un botón, nunca mejor dicho:
¿Cómo puedes tener una experiencia de usuario más o menos decente con semejante fragmentación? La principal ventaja de Android es al final su principal inconveniente: el caos reinante debido a que cada fabricante es un mundo y hace las cosas a su manera sin que nadie imponga un criterio medianamente unificador para que todo funcione.
Android tiene un Market terrible.
Android, al igual que iOS, tiene un ‘Market’ donde los desarrolladores pueden vender sus aplicaciones y así puedan ser instaladas sencillamente, exactamente igual que la App Store de iOS…con una diferencia: que Apple revisa bastante más las aplicaciones antes de dar el visto bueno para que aparezcan y Google pues digamos que no tanto. ¿Qué sucede? Cosas del estilo:
¿Cómo se denuncia una aplicación en Android Market? Este CARADURA nos ha montado un launcher: http://t.co/9g84B6Jm con sus banners, claro.
Ahí van a vuelapluma dos ejemplos del caos que existe en el Android Market. ¿A quién te quejas? Google apenas controla cosas así. ¿Cómo esperas entonces encontrar aplicaciones de calidad? ¿Cómo esperas que los desarrolladores serios apuesten por tu plataforma si apenas vas a cuidar que no les plagien ni se lucren a tu costa?
Android es un caos incluso en el número de terminales
¿Alguien lleva la cuenta de cuántos Samsung Galaxy hay ya en el mercado? El S, SII, Note, Ace, Spica, Tab, etc… y sin contar los otros 8000 modelos de HTC que también hay. ¿De veras? ¿Cuántos iPhone hay actualmente en el mercado a la venta? Tan solo 3 modelos: el 4S, el 4 y el 3GS. Una elección mucho más lógica y sencilla.
Y hace no mucho, cuando había tan solo el 4 y el 3GS a la venta, cualquiera de los dos habían vendido más unidades que cualquier Android, lo cual resulta especialmente flagrante en el caso del iPhone 3GS pues las estadísticas dicen que se han vendido más unidades de un modelo lanzado al mercado en 2009 que cualquier Android recién salido al mercado… ¡Sigue plantándole batalla! ¿Por qué no se deciden de una vez por todas a lanzar menos terminales pero más decentes y dejar esa estrategia tan de Nokia en los 90? No hay más que ver dónde se ha quedado Nokia… Y ya porque nos centramos en smartphones, que si nos centramos en tabletas la cosa está aún peor:
En definitiva: Android es un caos.
Android ha sido un intento -medianamente buen intento, pero ya– por parte de Google de plantar cara a iOS. Apple al menos fue el primero en arriesgarse a lanzar un terminal como el iPhone, radicalmente distinto a lo que existía en el mercado… ¿Recuerdas el Nokia N95? Aunque siempre quedarán cosas graciosas como lo de Samsung cuando intenta copiar al iPhone de una manera bastante cómica:
¿Alguien aporta algo más de luz en los comentarios?