¡Que inventen ellos!

Marzo de 2014: El LAB de RTVE.es gana un premio de periodismo digital debido a la «innovación al presentar contenidos» usando recursos web.

Agosto de 2014: RTVE se deshace de los técnicos del LAB de RTVE.es.

El LAB de RTVE produjo en los últimos tiempos piezas realmente innovadoras como Estafeta 1, Generación 12-1, El derbi de Europa. Piezas que, a los que nos dedicamos a buscar nuevas maneras de contar la información en nuevos lugares como Internet, estaban en los repositorios de cómo se deben hacer las cosas. Sin más, una charla de dos de los ex-miembros del LAB de RTVE.es en la que cuentan algunos detalles de su dí­a a dí­a:

(ví­a Juanlu Sánchez).

Al principio, todo era online

Para los que llevamos ya unos años predicando esto nos resulta menos curioso, pero no por ello quiero dejar de hablar de ello y resaltar de casos: Internet sigue siendo el medio más económico y fácil para generar de cero una marca y una audiencia a dí­a de hoy. Solo era cuestión de tiempo que tuviésemos varios casos, algunos más grandes que otros, pero de los que me apetece hablar hoy:

Hola mamá

Hace no mucho en Arturo Soria (Madrid) ha abierto una pequeña tienda para toda esa gente interesada en el «movimiento craft», en las manualidades, en los colores pastel y en esa tendencia llamada ‘las malenis’. Lo curioso de Hola mamá es que comenzó como un blog en 2009. Tuvo tanto éxito que poco después montó la tienda online con cosas para hacer manualidades. Y, ahora que tiene controlado el público online se lanza a por el público más offline, con una tienda fí­sica en Madrid.

Mr. Wonderful

Javi y Angi son dos diseñadores gráficos que un dí­a decidieron salir de sus respectivas agencias y montar un pequeño estudio creativo llamado Mr. Wonderful. Sus diseños con mensaje entre en lo naí­f y lo optimista, terminaron por tener bastante viralidad gracias a las redes sociales y decidieron montar una tienda con esos diseños impresos en varios objetos. Así­ fue como nació Mr. Wonderful Shop, cómo han conseguido vender sus productos en prácticamente cualquier gran superficie tipo Fnac y cómo, por ejemplo, en 2013 arrancan una colaboración con Oysho para lanzar varias prendas al mercado.

Manuel Jabois

Por poner un tercer caso más alejado de algo que puede ser muy de nicho, siempre me gusta poner el caso de Jabois. Manuel Jabois era hace unos años un redactor en Diario de Pontevedra. Continuó con una columna semanal en la contraportada y no hubiese ido a más si no fuese porque el propio Jabois ofrecí­a la columna completa en su blog personal. Allí­ también publicaba otros artí­culos y su estilo personal fue conquistando a una audiencia que, gracias al boca a boca, fue creciendo y superando la constricción de tener que estar en Pontevedra para leerle, hasta que consiguió llegar a oí­dos de grandes periodistas. Así­ fue como hace un par de años editó el libro que le ha hecho más conocido hasta ahora, Irse a Madrid. Actualmente Manuel Jabois es periodista en Madrid, en El Mundo y en otros medios como Jot Down y Onda Cero.

¿Qué tienen estos tres casos en común?

Creo que estos tres casos tienen algo bastante en común, un objetivo inicial muy claro de generar una masa crí­tica de comunidad que supeditaba al resto de cosas: Javi y Angi no se preocupaban de que sus diseños fuesen compartidos libremente, Jabois no exigí­a pagar por leer sus contenidos. Ambos sabí­an que ceder en la gratuidad de su contenido a corto plazo suponí­a un primer paso para poder monetizar otras cosas: la tienda en el caso de Hola Mamá o Mr. Wonderful, su talento para poder trabajar en un medio más grande en el caso de Manuel Jabois. A ambos les interesaba generar una comunidad importante alrededor.

Y, aún pese a todo, creo que muchos artistas siguen sin entender esto: probablemente sea más importante preocuparse en el pequeño número de seguidores fieles, que potencien el boca a boca y tu principal producto que en un gran mercado al que ya es prácticamente imposible llegar de manera directa por la cantidad de cosas con las que compites. Estoy seguro de que iremos viendo poco a poco un interesante nicho de mercado en herramientas y maneras de conseguir encontrar y aprovechar esa comunidad que pueda estar interesada en tu producto.

Al fin, nuevo Instapaper

Uno de mis servicios web favoritos, tras ser comprado por Betaworks, anuncia su rediseño. Se puede acceder ya mismo a la nueva beta de Instapaper.com. Muchas ganas de ver qué hace un equipo como el de Betaworks con un producto tan interesante de cara al futuro del consumo de contenidos en Internet como es Instapaper, y más teniendo en cuenta que ahora también son los dueños de Digg (y, por tanto, también de Digg Reader, mi lector habitual de RSS).

Lecturas recomendadas de verano

En mi búsqueda de libros para leer estas vacaciones me he encontrado un mismo libro recomendado en varios sitios distintos de Internet (Error500, El arte de presentar, etc…), lo cual quiere decir o que es bueno o que tiene una buena campaña de marketing detrás (o ambas).

El libro es Pensar rápido, pensar despacio, escrito por el Nobel de Economí­a de 2002 donde habla de nuestra manera de decidir y pensar en momentos de incertidumbre. Además está en formato digital, inmejorable la ocasión para leerlo en breve.

Y, ahora sí­, si me centrase en libros que me han gustado y que he leí­do últimamente hablarí­a de dos: en primer lugar Increí­blemente Simple, donde Ken Segall (Creativo en Chiat trabajando para Apple durante mucho tiempo con Steve Jobs) cuenta parte del secreto de Apple y por qué merece la pena confiar en productos simples y sencillos, mientras que en segundo lugar y por motivos distintos me ha gustado Un dí­a de cólera de Pérez Reverte, donde se nos narra con una crueldad y visceralidad casi inusitada todo lo que sucedió en torno al 2 de Mayo hace ya unos años en Madrid, en plena batalla del pueblo contra los invasores franceses. Me gustó mucho.

Ahora mismo estoy leyendo ¿Qué hacer con España?, donde me ha sorprendido la primera parte del libro con una justificación que se va bastante atrás en lo histórico para explicar cierto carácter de Europa en general y de España en particular que me ha sorprendido mucho. También estoy leyendo, aunque con calma a modo casi de manual, El Manual del Estratega, que me parece bastante práctico y novedoso en algunas cosas.

*Nota: Todos los enlaces publicados en este artí­culo van con enlaces de afiliado. Gracias por apoyar a este blog.

De lo urgente y de lo importante

Una de las cosas más buenas que tiene The Cocktail es que de vez en cuando viene gente ‘de fuera‘ a dar una charla distinta, porque es un grupo reducido y porque somos más técnicos, hay más posibilidades de inspirar, etc.

La última fue hace apenas una semana y fue de Daniel Gayo, profesor en la Universidad de Oviedo y especialista en análisis de datos con Redes Sociales: profiling, análisis de futuros, tendencias y demás cosas que se pueden sacar de todo lo que hacemos y decimos en la red. Tengo la sensación de que hace tiempo ya habí­a visto alguna presentación suya porque la habí­a enlazado alguien del equipo de Politikon en Twitter, es probable.

En la charla Daniel sacó a colación el tema de lo urgente y lo importante, que es algo en lo que estuve enredado a nivel personal durante un tiempo largo hace unos años y creo que cada vez es más importante respecto del mundo en el que vivimos. Creo que por la crisis y por ciertas maneras en las que hemos sido educados y la propia estructura de la sociedad actual, damos más prioridad a lo urgente que a lo importante, lo cual a veces nos aparta mucho de los objetivos y nos hace caminar como pollos sin cabeza y de una manera un tanto errática.

Todo viene por la polémica que ha surgido en la blogosfera a raí­z de una nota de prensa que hemos visto varios esta mañana por la presentación de Movistar Influencers, una nueva plataforma de Movistar orientada hacia un supuesto tipo de público autodenominado influencer. Lo cierto es que el debate era necesario desde hace un tiempo en el sector y esta acción de Movistar simplemente ha sido un desencadenante y no un ataque especí­fico a la marca. Recomiendo antes de que sigas que te leas los artí­culos de Pepe Ortuño (link), Antonio Ortiz (link), y Miren Mariño (link) al respecto para hacerse una idea de por dónde van los tiros.

Cuando la blogosfera cabí­a en un bar

Salvo a Miren, conozco a Pep y a Antonio desde ya hace años y sé que, al igual que yo, han sido invitados a eventos por supuestamente, según la marca o agencia de turno, ser influencer en algún ámbito concreto, por lo que saben muy bien de lo que hablan y me parecen dos crí­ticas muy razonables.

Sus artí­culos se juntaron con el recuerdo de ver la semana pasada a Juan de Blogoff presentando los Premios Bitácoras 2012 como un auténtico rockstar (Juan, admí­telo, que además se te da bien) y recordé un tiempo en el que la blogosfera cabí­a en un bar. En un bar que cerró, por cierto.

Aquel lugar era el Negone, cerca del Santiago Bernabéu, y aquella era la ceremonia de entrega de los Premios 20Blogs 2006 ó 2007, la primera o segunda edición, vaya. Allí­ Juan iba como finalista por Blogoff y yo iba finalista por este blog; pero allí­ también estaba Alvy de Microsiervos, Antonio Delgado, Nacho Escolar, Rodrigo Zordor, Jonan Basterra, Marcos Morales, Gorka Limotxo, Antonio Cambronero, Octavio Rojas, Antonio Ortiz, Mauro Fuentes, Manu Contreras, etc… . Creo que ninguno de los que estaban allí­ en aquel momento se consideraba influencer ni tení­a lo que tiene ahora. Si bien es obvio que la blogosfera ha crecido.

Pero, como decí­a, la blogosfera fue creciendo y en 2008 ya encontramos ciertos sí­ntomas de que algo raro pasaba, si bien era algo muy de nicho (blogs tecnológicos) y con eventos concretos (presentaciones de producto) donde se invitaban a los bloggers y se pagaba por ciertas menciones. Un ejemplo de esta crí­tica la podemos ver en la entrevista de Antonio Delgado a Manu Contreras (Julio 2008), que causó bastante revuelo en lo que era la blogosfera en aquel momento y con cosas que aún se pueden seguir criticando a dí­a de hoy, 4 años después.

Como dice Manu en la entrevista, quizá el problema sea en que se intentan trasladar antiguas prácticas del viejo mundo por parte de las agencias e intentan aplicar cosas que hací­an con los periodistas a cosas que hací­an con los bloggers. A raí­z del tema de Internet y antiguas prácticas, recomiendo ver esta pequeña charla de Alberto Knapp (CEO de The Cocktail) en 2009 donde poní­a muy bien en contexto lo que es la innovación y como al principio con todos estos cambios lo que se intenta es replicar un modelo antiguo para luego empezar a hacer algo nuevo y ‘nativo’ de ese nuevo medio. Y precisamente eso es lo que creo que está pasando.

Y ahora, ¿qué hacemos?

No me importa en absoluto entonar el mea culpa porque todos los que trabajamos en esto hemos evitado discusiones con el cliente a la hora de hacer un evento e intentar mejorar este tipo de cosas. Volvemos otra vez a la dicotomí­a de urgente vs. importante y reparamos en que la selección de gente para invitar a un evento suele dejarse para el último lugar (normalmente porque hay que hacer otras cosas del evento) y al final uno termina tirando de la agenda más cercana, lo cual redunda en un alto nivel de repetición de gente en sus eventos.

Reconozco también que como blogger he rechazado ir a algún evento porque no veo el motivo de que me inviten a algo sobre lo que no controlo y reconozco también que en otros casos he asistido por simple insistencia debido a que poca gente iba a asistir al evento, alargando una y otra vez esto que intentamos solucionar, o al menos poner parches.

Sin duda alguna como dice Pep en su post, la situación ideal es caminar hacia eventos mucho más verticales y de nicho, pero hay que pensar en cómo ejercer una labor pedagógica de cara al cliente para evitar caer en la tentación de jugar con las cosas ‘a volumen’, calculando métricas cuantitativas tan ‘falsas’ como el número de gente a la que has impactado o si tu evento ha sido Trending Topic en Twitter o no. ¿Realmente aporta algo de valor?

Por nuestra parte, por la parte de gente que trabaja en agencias colaborando en este tipo de eventos, tenemos que reflexionar profundamente sobre cómo mejorar en este tipo de procesos, ser más ágiles y pensar en cómo vender esta evangelización lógica a los clientes, que vienen con filosofí­as de impactos y alcances que quizá en ciertos contextos digitales no tengan toda la lógica si estamos hablando en torno a relevancia y valor. Pero yo creo que es solo cuestión de tiempo y adaptación a esta nueva situación.

(Como excepción he decidido activar los comentarios de este artí­culo. Siéntete libre de abrir el debate y criticar este artí­culo, me gustarí­a ver un debate constructivo).

Es hora de pagar en Internet

Leo en el blog de Fesja un interesante post: «Es hora de pagar (más) por las apps», donde pone varios casos de ejemplo sobre cómo en Internet cada vez, por la crisis o por simple evolución del modelo, se va hacia un pago más directo sobre los servicios que usamos, y no algo indirecto (publicidad, datos, etc).

Y todo esto viene al caso de App.net, un «clon» de Twitter desarrollado por alguien que, cansado de ver publicidad y demás en Twitter, se planteó qué pasarí­a si Twitter fuese de pago. Todo comenzó con este post en el blog de Dalton Cadwell (CEO de App.net y de Picplz, para subir fotos a Twitter), donde abrió un muy interesante debate, presente en casi cualquier startup relacionada con Social Media, donde lo que se discute es a quién poner en el centro: al usuario o al anunciante. Esa batalla, al menos hasta el momento, la termina ganando siempre el que defiende al anunciante, porque es al fin y al cabo del que se obtiene la financiación.

Pero Dalton decidió montar directamente algo similar a Twitter y hacerlo de pago. Montó una especie de Kickstarter y decidió que si querí­as un año de suscripción al servicio tienes que pagar $50, mientras que pagas $100 si quieres una cuenta de desarrollador, con acceso a la API y demás. Ha recaudado cerca de 1 millón de dólares, que se dice pronto, y que serí­a su facturación anual para 2012 hasta el momento.

Me hice cuenta en Julio dentro de App.net y hasta hace unos dí­as no tuve acceso, porque están un poco colapsados por el aluvión de gente. Entré por la misma curiosidad que me llevó a entrar en Twitter en 2006 o en cualquier otra red social, a diferencia de que por ésta sí­ que he pagado directamente. No me importarí­a pagar $50 anuales por Twitter si eso me permitiese ciertos beneficios como no tener publicidad, por ejemplo. Al fin y al cabo es mucho menos dinero que una suscripción anual a Spotify, por ejemplo (99€).

A lo que voy es que, al igual que sucede con la música igual creo va a suceder con estas empresas de servicios sociales: uno seleccionará sus 2-3 favoritos por los que pagará lo que haga falta porque le resultan imprescindibles o le encantan, mientras que por el resto pagará más bien poco o lo usará gratis a cambio de algo (publicidad, etc).

La pregunta que se hace todo el mundo es: ¿Y hay gente en App.net? Pues tengo que admitir que ayer estuve echando un ojo y sí­ hay caras conocidas para mí­ como el propio Fesja, Pantulis, Rafacampoamor, Javi Soto o Victoriano Izquierdo. Supongo que a App.net le falta aún salir del Alpha y sacar una beta con cosas interesantes como subida de imágenes, app para iOS que está en desarrollo y una serie de cosas que merezcan la pena y sean realmente diferenciales sobre Twitter. Sea como fuere, App.net me parece, al menos por ahora, la apuesta más seria para Twitter en bastante tiempo. Y quizá la batalla pueda ser apasionante, veremos.

Por cierto, en App.net soy Milleiro.

PD: Sobre la crisis de Twitter cerrando la API a cal y canto ya se ha hablado bastante. Entre los últimos posts interesantes publicados por ahí­ están este post de Dustin Curtis o este post de Ben Brooks.

Adiós Bloguismo

Adiós Bloguismo.com, ya no es ‘mi proyecto’: lo que arranqué hace unos años como blog con consejos para bloggers y community managers ya no me pertenece desde hace unos dí­as. El blog y el site completo han sido traspasados a una persona interesada por él y que se hará cargo de la completa gestión; el equipo de redactores (ílvaro, Aitor y íngel) tampoco seguirán escribiendo en el sitio.

Simplemente querí­a comunicarlo por el hecho de posibles dudas/sugerencias futuras respecto del site, ya no soy la persona a la que os debéis acercar. Sirva ésto para poder soltar algo de lastre y poder dedicarme con más foco a otro proyecto personal que quizá venga pronto: reconozco que no he tenido el tiempo necesario para hacer todo lo que querí­amos hacer con Bloguismo al tener que compaginarlo con mi trabajo.

Estoy realmente orgulloso de lo que hemos conseguido con Bloguismo: partir de cero con un blog para plasmar todo lo que hemos ido aprendiendo estos años hasta llegar a esta situación. El blog ha sido finalista en algunos premios como los 20Blogs en 2010, así­ como testigo del camino que han andado ílvaro (cuando empezó en Bloguismo no trabajaba en Redes Sociales y hoy gestiona las de una gran marca como H&M tras haber dejado una agencia como Buzz Marketing), Aitor (Un Cafelito a las 11 está poco a poco convirtiéndose en un blog personal de referencia en lo suyo) y íngel (comenzó tí­midamente a escribir consejos legales en Bloguismo y la verdad es que se ha hecho un hueco en esa blogosfera-twitteresfera de temas legales en Internet).

¿Y ahora? Ahora unas –creo que merecidas– semanas de vacaciones, y luego nuevos proyectos que estarán por venir…

El valor de la confianza

Si hay algo que me parece clave para que un negocio funcione es la confianza: un bien intangible que carbura las mejores relaciones y que como todo lo bueno también tiene algo de fragilidad. Pocas cosas hay peores como la pérdida de la confianza. Por ello también su valor.

En Pontevedra nació en el 68 Supermercados Froiz, una cadena que está entre las 20 primeras en España en distribución minorista, con 260 tiendas en varias comunidades. Su fundador, Magí­n Froiz, es alguien a quien tengo mucho respeto, por su manera de ser que expresa de vez en cuando, como en esta recomendable entrevista donde resume su filosofí­a elemental y tan olvidada a veces de poner al cliente en el centro.

Mi madre, también emprendedora en Pontevedra, con una Agencia de Viajes que desde el 71 aún mantiene abierta en el centro de la ciudad –pregúntenle a cualquier pontevedrés si no ha viajado alguna vez gracias a mis padres– siempre me poní­a como ejemplo el caso de un supermercado de Froiz que, desde siempre, ha mantenido a los mismos empleados allí­ con su misma filosofí­a: el carnicero que lleva allí­ décadas y establece confianza con sus clientes, la cajera que es ‘la de siempre’…

Vengo de comprar hace un rato en el supermercado de enfrente de mi casa, que es un Mercadona, y viene a ser un poco la antagoní­a bajo mi punto de vista al modelo de Magí­n Froiz: excesiva rotación de personal, las pesadillas de sus interproveedores… en fin: Mikel Iturriaga lo expresó mucho mejor que yo en su «Estimado Señor Mercadona».

Con el tiempo he visto y he aprendido la importancia de la confianza, puede llegar a ser algo realmente valioso. Cuando te pones a abrir un blog o cualquier proyecto en Internet, tienes que tener una confianza clave en la gente que tiene los servidores donde alojas todo: es realmente fácil tener una pesadilla con un servidor y poder echar a perder años de trabajo o dinero si realmente tienes un negocio online.

En todos estos años luchando con hostings para las cosas que he ido haciendo en Internet he valorado sobre todas las cosas la atención al cliente, el poder enviar un email o una llamada urgente en la madrugada porque se te ha caí­do el servidor y tener a alguien al otro lado que inmediatamente se pone a trabajar en ello.

Reconozco que, tras años y años probando aquí­ y allá, con hostings americanos y españoles, puedo decir que he establecido una relación de auténtica confianza con los chicos de RedCoruna, un pequeño (en aquel momento) alojamiento español que contactaron conmigo hace años para contarme un poco lo que hací­an y permitirme probar sus servicios.

El trato con la gente de RedCoruna es excepcional: sus técnicos tienen una paciencia y una destreza que pocas veces he visto para problemas con servidores. Además, la confianza de poder tener alojado en España tu sitio con la posibilidad de tener soporte 24 horas en castellano es algo que te quita cualquier miedo de la cabeza y permite centrarte en lo fundamental: tu trabajo en Internet.

Puedo asegurar que no he cobrado un euro por escribir este artí­culo; es más: busca los comentarios sobre RedCoruna en Twitter y verás que el porcentaje de gente contenta es realmente elevado. Es reconfortante ver que hay gente que aún sigue valorando la confianza en sus negocios.

5 apps para iOS que me han gustado últimamente

íšltimamente he probado algunas aplicaciones interesantes de iOS y aprovecho este post para comentarlas y quitarlas de la lista de ‘pendientes’. Reconozco que cada vez tengo menos aplicaciones en mi iPhone y creo que es tendencia general a usar más el navegador y menos las aplicaciones, pero pese a todo se siguen haciendo muchas aplicaciones interesantes que merece la pena destacar:

  • Cheddar es otro de esos gestores de listas de cosas por hacer pero con sincronización y multiplataforma. Recuerda un poco a Wunderlist pero tiene alguna cosa más y el diseño es realmente bonito.
  • Real Racing para Mac controlado desde iPhone/iPad es algo que no es una aplicación de iPhone al uso, pero me encanta y he descubierto hace relativamente no mucho. Real Racing es un genial juego de carreras para Mac e iOS y ahora se puede, con el juego del Mac, usar el iPhone como volante si están conectados a la misma Wi-Fi y sin necesidad de comprar la app en iOS, pues va todo por el navegador Safari. La experiencia es bastante buena.
  • Byword se ha convertido en mi favorita para escribir textos largos en Mac o desde mi iPhone, pues además lo puedes sincronizar en Dropbox y puedes exportarlo a Tumblr, WordPress y cualquier otra plataforma. Se ha convertido en una imprescindible.
  • WTHR será la app del tiempo favorita para todos los fans de Dieter Rams y del minimalismo, utilitarismo y sencillez en el diseño. El tiempo desde un punto de vista minimalista.
  • Gabi me ha sorprendido gratamente. Digamos que entra dentro de la categorí­a de «Aplicaciones de visualización de información» como pueden ser Flipboard. Si Flipboard se encarga de feeds de información en general, Gabi se encarga exclusivamente de información en tu cuenta de Facebook, jugando además con condicionales. Por ejemplo, cuáles son las fotos de tus amigos más vistas esta semana, pero de una manera realmente bonita. Merece la pena pagar por ella.

A todo esto, una reflexión final: nunca entenderé el hecho de Apple de no dejar en su App Store aplicaciones de juegos de azar o de material adulto, que se pueden encontrar en cualquier sitio de Internet fácilmente. A dí­a de hoy ya se puede jugar al póker desde el móvil en España pero no desde iOS, lo cual es un poco raro teniendo en cuenta que fácilmente en Internet con cualquier navegador se puede jugar a la modalidad Texas Holdem o a cualquier cosa medianamente prohibida en la App Store. ¿Supondrá un cambio esta medida ahora que no está Jobs? Yo apuesto a que sí­, en un futuro no muy lejano. Veremos qué sucede.

Mi ciclo para consumir información (2012)

Un dolor de cabeza ‘de siempre’ de cualquier usuario medianamente intensivo de Internet es el de qué hacer con toda esa información que nos encontramos y cómo gestionarla y utilizarla. Llevo años probando mil cosas, desde GTD a Bloglines pasando por Read it Later, Evernote, Ifttt o Google Reader con sus starred, pero algo que llevo probando unos meses con bastantes buenos resultados es lo siguiente: Instapaper + Pinboard + Timely. ¿Cómo?

  • En el momento en el que encuentro información que quiero leer más tarde lo mando directamente a Instapaper. Me gusta mucho más que Read it Later por su sencillez, agilidad y versatilidad, así­ como por estar soportado por todos los programas que uso habitualmente en el iPhone, especialmente Tweetbot, Flipboard y Zite, así­ como un bookmarklet que se puede añadir a Safari en el iPhone y resulta muy útil.
  • Reconozco también que rara vez leo algo al momento, a no ser que sea algo realmente urgente, ante lo cual diferencio dos momentos distintos: el momento en el que leo algo y el momento en el que echo un vistazo y voy mandando cosas a Instapaper.
  • Cuando tengo un bloque de tiempo amplio y puedo dedicarlo a leer algo (normalmente a primerí­sima hora o a última hora), entro en Instapaper, leo los elementos que tengo pendientes y ahí­ tomo tres decisiones: descartarlo, tuitearlo (Timely me lo programa para el mejor momento al dí­a siguiente) o guardarlo en el archivo (Pinboard va de fábula).
  • Diferencio dos momentos distintos: el momento en el que leo algo y el momento en el que echo un vistazo y voy mandando cosas a Instapaper.

  • Y sí­, yo era de los que usaba Delicious pero creo que con tanto relanzamiento le han metido tantas cosas que lo han destrozado y dejado como algo inútil cuando precisamente es lo último que necesito a la hora de gestionar información. Y justo Pinboard me recuerda al Delicious de hace años, así­ que exporté todo y lo uso siempre.
  • Uso siempre bookmarklets para guardar información y no lo hago con extensiones, me parece mucho más cómodo. Y sí­, suelo tener a cero Instapaper porque intento revisarlo a fondo todas las semanas para dejarlo a cero por si queda algo pendiente.