Hoppí­polla

Sigur Rós, por si no los conoces, son una de las bandas más sorprendentes quizá de las dos últimas décadas, que se han hecho un hueco en mi altar particular junto a Lambchop, Wilco, Los Planetas y alguna joya más que he ido descubriendo en los últimos años. Sigur Rós son islandeses y por ello cantan en su idioma así­ como también en Vonlenska o Hopelandic, un particular idioma que emplean en algunas de sus canciones.

Y traigo aquí­ a Hoppí­polla, uno de los temas que los catapultó a la fama hace unos años y que viene a significar algo así­ como «Saltando en los charcos», con un ví­deo simplemente precioso en directo; sólo con ver ese paisaje dan ganas de irse a vivir a Islandia. La canción puede interpretarse como una oda a los momentos de felicidad. Genial la orquesta de cuerdas y viento.

El problema de Myspace

Myspace ha hecho el eterno rediseño, en un intento de frenar la curva de campana en la que está metida y un uso cada vez menor, en parte por el uso de alternativas como Facebook o Bandcamp.

Yo, por ejemplo, pago una premium de Spotify por 10 euros al mes y no puedo escuchar legalmente el último de Arcade Fire o el de Interpol, y no soy el único. A dí­a de hoy la aplicación de Myspace para iPhone se llama Myspace Mobile y «sólo» permite subir fotos, enviar mensajes y las cosas tí­picas.

¿Tanto costarí­a hacer una aplicación de Myspace que nos permitiese escuchar desde el iPhone a bandas que tienen perfil allí­? Abres además posibilidades de monetización que por x o y no les ofrece Spotify a las bandas independientes: abre la competencia a Spotify donde no está Spotify. Me encantarí­a poder escuchar legalmente y pagando por ejemplo a Ornamento y Delito pero no puedo, porque ni están en Spotify ni están en la iTunes Store, que también ciertamente cada vez uso menos.

Pero claro, juntar a la long tail de proyectos geniales como Etsy con un dinosaurio como Murdoch es prácticamente imposible.

La Casa Azul ya disponible en Spotify

Habí­a grupos en Facebook pidiéndolo y sí­, finalmente toda la discografí­a completa de La Casa Azul está en Spotify disponible, compruébalo: La Nueva Yma Sumac, lo que nos dejó la revolución, el gran La Revolución Sexual, El sonido efervescente de La Casa Azul y también Tan simple como el amor. Gracias Elefant, aunque sin tiempo no ha sido, más razones para comprarse una premium de Spotify…

Los Planetas – Una ópera egipcia

«Si te quieres venir puedo pasarme a buscarte, si te quedas conmigo para que pueda contarte lo mucho que te necesito, aunque creo que ya lo sabes voy a volver a decirlo: Que te quiero más que nadie, que te sigo queriendo lo mismo para que alivies mis males: señora de mis abismos.»

Los Planetas – Señora de las alturas

Han vuelto, han vuelto esos pesados que menciono cada dos por tres, esos que ponen banda sonora a mi vida, a estos últimos años, esos que aún me siguen emocionando disco tras disco.

Han vuelto Los Planetas, con un disco llamado Una ópera egipcia, pues de esta manera llamaban los gitanos a aquellas obras geniales que se quedan sin superlativos. Se usaba mucho en referencia a La Niña de Los Peines, pero es cierto que nació a raí­z de que a Verdi le encargasen una ópera para inaugurar el Canal de Suez, y aunque se inauguró en El Cairo impactó con su escenografí­a y un vestuario genial, con coronas de oro puro y espadas de plata.

Segundo disco de una etapa más flamenca

Sí­, creo que Una ópera Egipcia puede considerarse de alguna manera una continuación de La Leyenda del Espacio, una auténtica joya que he comenzado a apreciar más y más a medida que ha ido pasado el tiempo por toda la complejidad que entraña.

Es una continuación de la etapa flamenca porque Jota sigue adaptando palos flamencos: alegrí­as, cantes de pizarra de Manolo Vallejo, de La Niña de los peines y de todo un folklore que para gran parte del público de este paí­s -entre los que me encuentro- estaba de alguna manera oculto; yo reconozco haber descubierto algo más a fondo la obra de Camarón desde que escuché por primera vez La Leyenda del Espacio.

Y creo que, pese a todo, sigue siendo genial: si con sus primeros discos me descubrieron a bandas como Jesus and Mary Chain, Mercury Rev, The Smiths, The Troggs, The Byrds o Red House Painters, pues ahora hacen lo mismo pero con el cante andaluz, poniendo a toda esta tradición al mismo nivel que otros grandes artistas internacionales, haciéndonos ver que a menudo no hay que salir de España para encontrar grandes álbumes.

Versionando voy, versionando vengo

En un foro underground de Los Planetas un usuario ha ido colgando los originales flamencos en los cuales los Planetas se han basado para las canciones de sus últimos discos, lo cual en parte también sirve para demostrar que no estamos ante un plagio-versión descarada sino también ante una adaptación de las letras al siglo XX y al lenguaje planetero tradicional, como si de un puzzle se tratase.

Qué me parece Una ópera Egipcia

Reconozco que me gusta más La Leyenda del Espacio que Una ópera Egipcia pero no por ello el segundo me parece malo: sí­ que es cierto que gran parte de los seguidores estamos esperando otro Encuentros con Entidades u otro Super 8, pero dudo mucho de que vuelvan por esos lugares, especialmente por Jota. ¿Conformismo? Quizá.

No obstante, me gustan mucho varios temas del disco, especialmente cuatro temas que van seguidos en el disco: Siete Faroles, que me recordó instantáneamente la primera vez que la escuché a Deberes y Privilegios, No sé cómo te atreves que con La Bien Querida gana mucho especialmente de cara al final de la canción, Señora de las alturas que tiene una letra preciosa (he incluí­do fragmento al comienzo del artí­culo) y también La Veleta con La Bien Querida, un auténtico paso por turmix de una canción de La Niña de Los Peines que probablemente ni ella la reconocerí­a.

Lo que muchos tenemos con Los Planetas supongo que es lo que tienen muchos padres con sus hijos, que pese a todo lo que hacen siguen siendo sus hijos y por ello les siguen queriendo hagan lo que hagan, sea mejor o peor. El fenómeno fan, supongo, aunque siempre quedarán ví­deos para la eternidad:

Lambchop: esa pequeña gran joya

Si me conoces un poco sabrás que hay una banda que me apetece ver en directo desde hace años y años y años: se llaman Lambchop y son americanos (concretamente de Nashville, Tennessee… ahí­ queda eso).

La magnética voz de Kurt Wagner y su perfecta conjunción con su banda han hecho que algunos crí­ticos hayan hablado de Lambchop como la mejor banda americana surgida en los 90, algo que debe marcar y mucho.

¿Cómo conocí­ a Lambchop?

Fácil: en Mayo de 2004 vinieron a tocar a Pontevedra, uno de esos conciertos que nadie se explica salvo que sea capricho de alguien con poder (como Bloc Party en Salamanca hace unos años o Depeche Mode en Pontevedra en el 93, aunque era Xacobeo).

Lambchop han venido a España en más ocasiones: creo que a Madrid y Kurt Wagner en solitario a Sevilla hace no mucho… pero nunca ha surgido el momento o me he enterado tarde. Sí­, sé que algún dí­a tacharé a Lambchop de mi particular lista, al igual que lo hice con Kings of Convenience el pasado Noviembre.

¿Por qué Lambchop?

Claro: os preguntaréis… ¿Es otra banda freak de pajilleros de Radio 3? En absoluto: gracias a Lambchop con el tiempo descubrí­ a Wilco, que son otra joya que tampoco he conseguido ver en directo (aunque van al Primavera Sound en Mayo, única fecha en España!) y lo dejaré para otro artí­culo.

Los que saben de esto dicen que Lambchop hace country alternativo, aunque sinceramente yo ya no sé dónde encuadrarlos, simplemente me limito a oí­rlos… son la banda sonora ideal para dí­as reposados, descansados…

¿Necesitas más razones? Lambchop en Spotify, la musica hecha poesí­a.

La importancia de la pose en el rock

Quien me conoce sabe que me encantan Los Planetas desde hace unos años, y creo que cada vez más: ¿las razones? No lo sé, alguien dijo una vez que «Los Planetas son la banda sonora ideal para cualquier persona entre 18 y 35 años» y también Alexliam comentó en su momento que «Da igual lo que estés viviendo, Los Planetas ya lo han pasado antes y tienen una canción sobre ello«.

Pero creo que también, pese a todo, es porque Los Planetas tienen una pose, porque me encanta verlos encima del escenario: Jota impertérrito (o con el puño en alto en Devuélveme la pasta) y un cigarro en la mano, Eric Jiménez aporreando la baterí­a con su particular danza mientras Florent se mueve al ritmo de los pedales de efectos de su guitarra…

Y no sólo me pasa con Los Planetas: me pasa con otras bandas como The Sunday Drivers, los ves encima de un escenario y pareces trasladado a cualquier concierto de los 60: uno con el bajo Rickenbacker, otro con sus melenas… me pasa algo parecido también con Sidonie.

Podrí­an tocar la misma música y ser como cualquier banda estándar, pero no lo son. Love of Lesbian se disfrazan y son unos cachondos mentales encima del escenario, otros que bien bailan también.

¿Es la pose fundamental para triunfar? Absolutamente no, porque si sólo vives de la pose probablemente te quedes como un triunfito más, está claro que tanto Los Planetas como The Sunday Drivers tienen canciones que te llegan ahí­ adentro, que esa pose es sólo un complemento más, pero que a mí­ al menos me gusta en determinadas situaciones.

Probablemente si dejasen de meterse la droga que se meten o Jota empezase a ser simpático con el mundo en general después de los conciertos y no sólo con las mujeres Los Planetas dejarí­an de ser un poco Los Planetas, creo que les da ese halo de algo más que una simple banda de rock, quizá sea eso.

PD: Nunca me cansaré de enlazar 10 razones para respetar a Los Planetas.

Pierre Bastien y Javier Corcobado – Festival SalaMarte 2009

Anoche se celebró el segundo concierto de la II Edición del Festival SalaMarte – Festival de Música Alternativa de Salamanca, un festival que me encantó en su primera edición.

Me encanta porque no suelo conocer a todos los artistas y siempre me encuentro gratas sorpresas. Anoche tocaron Pierre Bastien y Javier Corcobado, hoy es el tercer y último dí­a con Wonderfool Comestics, Lemuripop y Dhera Dun.

Pierre Bastien es un artista conceptual francés que ha colaborado con gente más o menos importante y es bastante curioso: la música la hace con piezas mecánicas, que al moverse hacen ruí­do, en el ví­deo lo podéis comprobar. Además, va grabando partes de su instalación y juega un poco con la combinación de ví­deo-música.

Javier Corcobado me sorprendió, en parte por no haberlo conocido antes (en ciertos ambientes indie es conocido, mea culpa) y en parte porque me dejó un sabor de boca agridulce, pues su música es un poco inclasificable, tiene canciones distintas entre sí­.

Me encantó La Navaja Automática De Tu Voz, aunque tocó otras como Negue, Hoy no voy a cantar o En el coño del mar que no estuvieron mal. Sorprendente su música, me gustó; veremos qué tal se da hoy el último dí­a…

viaje a los sueños polares

cuando pesen demasiado
la rutina, el trabajo y la vida en la ciudad
nos iremos en un viaje infinito
con esa tonta sensación de libertad…

family – viaje a los sueños polares

No hay nada como ser un currante como para empezar a apreciar lo que son las vacaciones….y yo me voy a coger unas minivacaciones hasta el Miércoles:

Así­ que por tanto sólo me queda desearles un feliz puente y mucho cuidado por la carretera, que les quiero ver a todos de vuelta ;)

wishlist

I wish I was a neutron bomb, for once I could go off
I wish I was a sacrifice but somehow still lived on
I wish I was a sentimental ornament you hung on
The Christmas tree, I wish I was the star that went on top
I wish I was the evidence, I wish I was the grounds
For 50 million hands upraised and open toward the sky

I wish I was a sailor with someone who waited for me
I wish I was as fortunate, as fortunate as me
I wish I was a messenger and all the news was good
I wish I was the full moon shining off a Camaro’s hood

I wish I was an alien at home behind the sun
I wish I was the souvenir you kept your house key on
I wish I was the pedal brake that you depended on
I wish I was the verb ‘to trust’ and never let you down

I wish I was a radio song, the one that you turned up
I wish, I wish, I wish, I wish
I guess it never stops…

El futuro de las discográficas

A través de Menéame topé con este artí­culo: Los músicos huyen de las grandes discográficas. No me vení­a a decir nada nuevo: Jarabe de Palo hace tiempo hace tiempo que va por libre y los Hombres G sacaron hace unos dí­as HombresG.TV, un canal nuevo de comunicación donde publicarán sus canciones, ví­deos, etc… de todas maneras el artí­culo está bien, y explica para alguien no muy metido en el tema lo que está pasando en los últimos años.

Habrá gente (aún la hay y bastante) que piensa que sólo estas acciones las pueden tomar las grandes bandas, que las pequeñas seguirán necesitando de las grandes multinacionales para triunfar. Y aquí­ es donde sacamos el gran producto del internet musical en castellano de los últimos tiempos: Vetusta Morla, una banda que estuvo 10 años viendo cómo su disco era rechazado por multinacionales, deciden autoeditarlo y ya llevan alrededor de 25.000 copias vendidas, sin más promoción que el boca a boca a través de internet y las redes sociales, tocando casi a diario últimamente por España a razón de 30.000 euros por concierto. Prueben a preguntarle por esta banda a cualquier chaval de entre 15 y 20 años y verán…

Y ahí­ está el futuro, yo sigo pensando que aún hay lugar para un producto en el ámbito de la promoción musical en internet tan fuerte o incluso más que Myspace, que bajo mi punto de vista personal se ha quedado desfasado hace ya un tiempo. Seguro que en los próximos años tendremos algo…

Publicada el
Categorizado como Creatividad