Leo esta noticia en La Voz de Galicia de hoy que me ha hecho bastante gracia. Hace un recorrido sobre los distintos naufragios que han existido en «A Costa da Morte» (costa de la provincia de A Coruña), enfocando sobre todo la astucia de los vecinos de la zona para hacerse con un buen botín antes de que se hunda el barco,no sin antes salvar a los tripulantes;como dice el artículo: pillos, sí, pero nobles.
Sobre todo me ha hecho bastante gracia una anécdota que me habían contando y yo no la terminaba de creer hasta hoy…
«NIL»
10 DE OCTUBRE DE 1927
Playa de Arou (Camelle)
Una fuente de anécdotas es el francés Nil . «Llevaba rica carga general de Burdeos para Bathrust (Gambia inglesa). Veinte coches, maquinaria, ricas telas, sedería de Damasco, productos químicos, harinas y mucho champán». Al rateo playero «acudieron gentes del interior y de las rías del norte».
«Uno cargó satisfechísimo un fardo. Observó que su contenido se revolvía y vio que había cargado nada menos que con un carabinero que se había metido dentro de un saco para resguardarse del frío durante la guardia y se había dormido».
Otros recogieron un líquido blanco en la playa y pintaron las puertas y las ventanas de sus casas con lo que suponían era pintura. «Las moscas acudieron a contemplar el cuadro». Es más, se pegaron a las casas, que habían recibido varias manos de ¡leche condensada! «Jamás la habían visto», excusa Baña Heim. Un vecino de Camelle acredita la certeza de esta anécdota y pide «que non se rían os señoritos coruñeses».
En fin…no consigo de todas formas imaginarme a la gente toda feliz pintando sus casas con leche condensada…menudo espectáculo.