Chacón

Para mucha gente Chacón es simplemente el apellido de una Ministra de Zapatero, en otros casos una futurible como candidata a La Moncloa por el PSOE, pero para todos los pontevedreses Chacón era y sigue siendo una pequeña fábrica de juguetes donde pasear tardes enteras escudriñando una carta a los Reyes Magos.

Soy consciente de que mi generación y las siguientes somos de Chacón, porque tampoco hay muchas jugueterí­as más en Pontevedra: recuerdo de una en Fray Juan de Navarrete (enfrente casi del Gonviz) que cerró cuando yo apenas contaba con unos años y que evidenció la supremací­a de Chacón.

Al cabo de unos años Chacón abrió un segundo Chacón: mucho más grande, en Augusto González Besada, en el centro de Campolongo. Recuerdo las primeras visitas a aquel Chacón: era como un supermercado del deseo para muchos de nosotros, que recorrí­amos los pasillos escogiendo y descartando algunos juguetes: sin duda alguna el pasillo de los Lego fue mi lugar favorito de Pontevedra durante muchos años.

Pese a todos los avances el verdadero Chacón, donde nació ‘el imperio’, sigue estando en Daniel de la Sota. Muchos de nosotros hace años que no entramos pero sí­ que sentimos una nostalgia especial cuando pasamos por delante, la misma que cuando nos da a todos los pontevedreses exiliados decidimos volver a casa por Navidad, duplicando la población de Pontevedra por cuatro ó cinco. De nieve, huracán y abismos, el sitio de mi recreo.

(Dedicado a Manuel Jabois, por tantos artí­culos sobre la vieja Pontus Veteris que leemos con cierta saudade los que estamos fuera, gracias por mantenerla viva).