Cierra la Librerí­a Michelena

La cultura en Pontevedra se ha convertido en tomar cañas y pinchitos. Es una ciudad de vagos,descerebrados y hedonistas.

Rescato ese comentario del artí­culo donde leí­ que sí­, es cierto, cierra la librerí­a más antigua de Pontevedra, la Librerí­a Michelena. Y no sé muy bien qué escribir.

Ciertamente, cada vez que subí­a a Pontevedra, el Saudade, Michelena, Solla y si me apuras Tipo eran mis lugares de visita obligada, fuese un fin de semana sólo o fuese el verano entero: entrar en Michelena era sumergirse en un universo paralelo, inundado por pasillos donde he aprendido muchí­simas cosas.

Gracias a Michelena encontré libros prohibidos (al fondo, dobla la esquina a la derecha, ahí­ los tienes), aprendí­ muchí­simas cosas que sé hoy, más de las que os creéis.

Y en parte, uno se siente un poco mal por comprar libros online, porque supongo que es lo que un poco habrán matado a librerí­as tradicionales como Michelena. í‰so y lo que dice el comentario, que la cultura se ha reducido a la cultura del pincho, y es cierto que pocos bares cierran, o eso parece.

Sea lo que fuere, yo voy a echar muchí­simo de menos Michelena. Muchí­simo. Me pregunto qué pasará con ése local, si caerá ví­ctima del ladrillo y los especuladores. Uno de los focos que iluminaban el pensamiento ilustrado de la ciudad, serí­a paradójico.

Os echaremos de menos, Michelena.

(Apunte, leed por favor el artí­culo que en 2006 mi semidios Manuel Jabois le escribió: Michelena).